El exfutbolista brasileño desclasificó algunos episodios de la desenfrenada etapa de los «Galácticos» en el club español.
Si bien no dio sus primeros pasos profesionales en el club español, buena parte del status deportivo que consiguió lo obtuvo jugando por el Real Madrid. No es otro que el lateral brasileño Roberto Carlos, quien estuvo por más de 10 años y 11 temporadas en el equipo merengue, con que el ganó todo lo imaginable.
El exfutbolista fue parte de la era de los «Galácticos», una etapa extraordinariamente exitosa del cuadro madrilista, en la que compartió vestuario con Ronaldo, Figo, Beckham, Casillas, Hierro, Raúl y Zidane. Pero también fue un tiempo de desenfreno, donde los jugadores mandaban por sobre los entrenadores, reveló recientemente el brasileño.
Roberto Carlos desclasificó algunos episodios para graficar esa era, como cuando llegó el brasileño Vanderlei Luxemburgo a la banca de los merengues.
«Era el segundo partido de liga, teníamos la costumbre de llegar a la concentración, dejar las maletas en el cuarto y antes de cenar tomar nuestras cervezas y vinos. En cada mesa siempre había dos botellas de vino. Ronaldo y yo le dijimos: ‘Profesor, la gente aquí tiene sus costumbres, lo va a ver, pero intente no quitar las botellas de vino y cerveza de la mesa porque sino vamos a tener problemas'», comenzó explicando a Canal 11 de Portugal.
«¿Qué hizo? Quitó primero la cerveza y luego las botellas de vino. Duró tres meses. El mundo del fútbol es pequeño, las noticias llegan rápido a la directiva y… chau», reveló.
Otro de los entrenadores de los que habló fue de Vicente del Bosque. «Era más un amigo. No necesitabas reglas. Los entrenamientos de lunes y a veces los martes eran a las 17:00. No los ponía a las 11:00 porque casi nadie llegaba», reconoció.
El lateral no escondió el orgulloso que le provoca esa época y el poder que tenían en el vestuario: «Yo hoy pienso, ¿cómo es posible que hiciéramos tantas tonterías? Acababa cada partido y era todo avión privado. Nos encontrábamos en la terminal privada de Barajas. Era Beckham que iba no sé a dónde, Figo, Zidane que iba a tal lugar, Ronaldo, yo… y teníamos que entrenar pasado mañana. Yo rezaba para que los partidos fuesen los sábados para poder ir a la Fórmula 1 los domingos. Eran vuelos privados a todos los lados», reveló.
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