– ‘Muertos de risa’: humoristas en guerra
Quiénes. Nino y Bruno.
La rivalidad. Lo primero que sabemos de Nino (interpretado por Santiago Segura, Madrid, 1965) y Bruno (El Gran Wyoming, Madrid, 1955) es que no se soportan: se odian tanto que terminarán con sus vidas disparándose durante la grabación de un programa de Nochevieja. Lo siguiente que nos cuenta Álex de la Iglesia, director de la película, es que a lo largo de sus carreras no han sido nada el uno sin el otro y también que matarse no es lo más cruel que se han hecho en la vida. Ambos se han creído imprescindibles, la estrella del dúo, pero a la vez han sido conscientes de que no tenían ningún futuro en solitario. Nino no tiene que esforzarse para lograr las risas del público, Bruno trabaja las bromas sin descanso. Mientras Bruno lleva la voz cantante, Nino es sólo el payaso tonto, una dinámica que les hará entrar en una espiral de envidia y desconfianza que se percibe en cada actuación. Pero cuanto más grotesca es la humillación de Bruno a Nino y más resuenan las bofetadas que le propina, –178 a lo largo del rodaje, Santiago Segura se molestó en contarlas–, más se divierte el público. Y ellos están dispuestos a todo por una carcajada.
– ‘El caballero oscuro’: la rivalidad esteta
Quiénes. Batman y Joker.
La rivalidad. “La locura, como tú sabes, es como la gravedad. Basta con un empujoncito”, le dice el Joker (interpretado por Heath Ledger, Australia, 1979; Estados Unidos, 2008) a Batman (Christian Bale, Reino Unido, 1974) y él sabe bien de qué va eso de la locura, ambos lo saben. El Joker es un psicópata carismático, un asesino amante del caos; Batman, una colección de desórdenes psicológicos obvios: estrés postraumático, doble personalidad, depresión profunda… “Ven a verme, yo pondré el vino, tú trae tu psique atormentada», le dice la psicóloga Vicky Bale en Batman Forever, dejando claro que el murciélago justiciero necesita tanto un poco de amor como tratamiento psicológico.
En El caballero oscuro, el Joker trata de enfrentar a Batman consigo mismo. Para ello le amenaza con matar a ciudadanos de Gotham hasta que revele su identidad. Esa promesa le llevará a asesinar a Rachel, la gran amiga de Batman y una de las únicas personas que conocen su verdadero rostro. El Joker no quiere que Batman muera, le necesita, lo considera “divertido”. Su principal objetivo es cortar el fino hilo que une a su archienemigo con la cordura y Batman trata desesperadamente de detener al Joker. Pero tendrá que hacerlo sin matarlo porque ese es el principal objetivo del psicópata, que el enmascarado sea igual a él, que abandone sus principios morales. Y el día que lo haga habrá perdido definitivamente la partida.
– ‘Chicas malas’: el instituto, ese polvorín
Quiénes. Cady Heron y Regina George.
La rivalidad. Georgina (interpretada por Rachel McAdams -Canadá, 1978-) es la Abeja Reina de su instituto y ejerce su liderazgo de manera despótica tanto con alumnos como con profesores e incluso con su propio séquito. Cuando Cady (Lindsay Lohan -Nueva York, 1986-) se muda a Los Ángeles y se integra en el instituto tras doce años en África comprende que las reglas que rigen ese entorno se parecen más a la selva de lo que imaginaba. Y de las costumbres de adolescente californianos sabe poco, pero sí sabe cómo luchar con las reglas de la jungla. Para derrocar a Regina destroza los bastante superficiales pilares de su reinado: su aspecto físico y su reputación; y le roba a su novio perfecto y sus secuaces alienadas. Lo que no esperaba Cady es que ese proceso que empezó como un juego de instituto la acabaría convirtiendo en el mismo monstruo que era Regina George.
– ‘Kill Bill’: ropa amarilla y ultraviolencia
Quiénes. Kill Bill y Beatrix Kiddo.
La rivalidad. Beatrix Kiddo (interpretada por Uma Thurman -Estados Unidos, 1970-) yace ensangrentada en el suelo de una capilla de mala muerte: ha sobrevivido milagrosamente a una matanza de la que era el principal objetivo. Bill (David Carradine -Estados Unidos, 1936-Tailandia, 2009-), su mentor, su amante y el padre del bebé que había en su vientre, ha orquestado el asalto para vengarse de su abandono. Pero el plan no ha salido exactamente como Bill había previsto y Beatrix Kiddo sobrevive. Ahora será ella la que se vengue y será implacable: recorrerá el mundo entero hasta acabar con todos y Bill será el último para que pueda sentir su aliento. Uno a uno van cayendo sus secuaces hasta que por fin Beatrix y Bill se encuentran frente a frente. Los Cinco Golpes Para Parar el Corazón de un Hombre, con los que ella pone fin a su vida, no son tan devastadores como darse cuenta de que ella le había guardado un secreto más: es más poderosa que él.
– ‘La muerte os sienta tan bien’: Bruce Willis, ¿yo soy guapa?
Quién: Madeleine Ashton y Helen Sharp.
La rivalidad: Madeline Ashton (Meryl Streep -Estados Unidos, 1949-) y Helen Sharp (Goldie Hawn -Estados Unidos, 1945-) se han pasado la vida aborreciéndose amistosamente, como esas amigas que se besan sin rozarse las mejillas y se despellejan antes de que el eco de ese beso se apague.
Madeleine ha boicoteado siempre la vida sentimental de su amiga, robándole todos sus novios desde el instituto, pero el último golpe ha sido casi letal: casarse con su prometido. Deprimida, desahuciada, obesa mórbida e internada en un psiquiátrico, Helen planeará una venganza que acabará con las dos convertidas en zombis descascarillados y, lo peor, en inseparables y conscientes de ello. Han pasado la vida tratando de destruirse y tendrán que pasar su no vida reconstruyéndose: “Tenemos que cuidarnos la una a la otra: yo te pinto el culo y tu pintas el mío”. ¿Acaso hay mejor definición del amor?
– ‘Ben-Hur’: enemigos como los de antes
Quiénes. Ben-Hur y Messalla.
La rivalidad: El judío Ben-Hur (interpretado por Charlton Heston -Estados Unidos, 1923-2008-) y el romano Massala (Stephen Boyd -Reino Unido, 1931-Estados Unidos, 1977-) han sido buenos amigos en la infancia –o mucho más que eso si consideramos las palabras de su guionista Gore Vidal, que en el documental sobre la presencia de personajes homosexuales en la historia del cine El celuloide oculto afirmó que había concebido la historia como si se tratasen de dos amantes– pero las turbulencias políticas han hecho que todo cambie. Ahora Messala y Ben-Hur son enemigos, el tribuno romano ha condenado a su antiguo amigo a galeras, le ha confiscado sus bienes y ha provocado la muerte de su madre y su hermana tras encerrarlas en una cueva de leprosos. El judío jura venganza y esta se llevará a cabo ante los ojos del mundo. O lo que viene a ser lo mismo en la Roma del siglo I: en el circo. Se enfrentarán en una carrera de cuádrigas.
Los caballos de Messala son negros y los de Ben-Hur blancos, las ruedas de sus cuádrigas vuelan en paralelo, ambos van en cabeza, cualquier pequeño contratiempo puede alterar la carrera. Messala vuelve su látigo contra Ben-Hur y lo azota, los látigos se enzarzan, las ruedas chocan y la cuádriga de Messala revienta en mil pedazos. Messala cae al suelo y es arrollado por el resto de los contendientes. Ben-Hur entra victorioso en la meta mientras Messala yace moribundo en el suelo. Le quedan minutos de vida, pero son suficientes para revelarle a su enemigo mortal que su madre y su hermana están vivas, pero ya es demasiado tarde, la lepra las ha destruido.
– ‘El séptimo sello’: la única enemiga invencible
Quiénes. Antonius Block y La Muerte.
La rivalidad. Al volver a su país tras luchar en las Cruzadas, Antonius Block (interpretado por Max Von Sydow -Suecia, 1929-) le propone un trato a La Muerte (Bengt Ekerot -Suecia, 1920-1971-): jugaran una partida de ajedrez. Si gana él le dejará tiempo para encontrar un sentido a su vida; si gana ella, se lo llevará con ella. La Muerte es una jugadora avezada y Block lo sabe, lo que no sabe es que ella está dispuesta a hacer trampas para llevarse su botín. Los movimientos de Block le darán tiempo suficiente para reunirse con su esposa y comprobar los efectos que la peste, la miseria y la superstición han causado en su pueblo. Pero finalmente La Muerte realiza su última jugada: el rey cae. Block también, no sin antes escuchar las palabras de su imponente rival: “Hubieras gozado más de la vida despreocupándote de la eternidad, pero es demasiado tarde. En este último instante, goza al menos del prodigio de vivir en la verdad tangible antes de caer en la nada”.
– ‘Atrápame si puedes’: el odio según Spielberg
Quiénes. Frank Abagnale Jr. y Carl Hanratty.
La rivalidad. Suena el teléfono en el cuartel general del FBI, es Nochebuena y las oficinas están casi vacías; casi, porque el agente Carl Hanratty (interpretado por Tom Hanks -Estados Unidos, 1956-) permanece sentado en su mesa: el experto en fraudes económicos ha sacrificado su vida por su trabajo y no hay ninguna familia esperando en casa para vivir esa noche especial. Tampoco hay nadie esperando a Frank Abagnale Jr. (Leonardo DiCaprio -Estados Unidos, 1974-), la voz al otro lado del teléfono, un adolescente de 19 años que lleva dos viviendo como un fugitivo, haciéndose pasar por piloto, médico y abogado y volviendo loco a todo el FBI con el agente Hanratty a la cabeza. Pero a pesar de ello el agente no le odia, a pesar de las burlas privadas y las humillaciones públicas a las que le somete Frank, siente cierta admiración por él, de la misma manera que el adolescente siente respeto por la rectitud y el tesón del agente. Por eso cuando el torturado Coyote caza por fin al Correcaminos en lugar de limitarse a ponerlo a la sombra durante el resto de su vida le ofrece un puesto de trabajo a su lado. ¿Difícil de creer? Pues es una historia real.