Este fue el segundo trabajo discográfico del grupo compuesto por los músicos Charly García, David Lebón, Pedro Aznar y Oscar Moro.
Este viernes 20 de diciembre se lanzó una edición especial de «La Granja de las Capitales», segundo álbum de Serú Girán, para conmemorar el aniversario número 40 desde su estreno oficial. Esta publicación se realizó gracias a la recuperación del histórico catálogo discográfico de Music Hall, realizada por el Instituto Nacional de la Música (INAMU).
Este nuevo lanzamiento consideró un gran trabajo de producción, el que incluyó la remasterización del sonido desde cintas, restauración de arte de tapa e inclusión de un insert con fotos originales nunca antes vistas de la agrupación integrada por Charly García, David Lebón, Pedro Aznar y Oscar Moro.
«La grasa de las capitales» en su nueva versión fue realizada en conjunto por el INAMU, Zarpa y otras 300 Producciones. El trabajo contó con la producción del Instituto Nacional de la Música, a cargo de su presidente Diego Boris, y de Gustavo Gauvry de la Asociación Argentina de Técnicos e Ingenieros de Audio (AATIA).
La nueva edición ya se encuentra disponible en plataformas digitales. Los formatos de CD y vinilo estarán a la venta a partir de enero de 2020 y cuentan con la restauración de todo el arte de la tapa, la que también incluye nuevas imágenes y un póster.
Sobre esta publicación, Pedro Aznar, quien estuvo a cargo de trabajar el sonido a partir de la copia de seguridad de las cintas máster, dijo: «Apareció de nuevo la música». El artista afirmó que esta remasterización buscó respetar la esencia de la música y el audio de aquel momento. «No intentamos ir a un audio moderno torpemente, sino que conservamos el espíritu del audio de los 70, pero mejorado», comentó.
Estas palabras se sumaron a las de David Lebón, quien señaló: «Un trabajo muy de hoy, escucho lo bien que suena y me da felicidad y orgullo. Escuchás las canciones y me emociono. ¡Viva Serú!».
Por su parte, Charly García declaró: «Este es un disco muy actual. Uno se pregunta cómo podíamos tocar esos complejos arreglos con tanta precisión. La respuesta es que ensayábamos mucho».