Sus números no son mejores que los de su predecesor, Alfredo Arias, pero sí logró darle otros aspectos al equipo que fueron valorados por la dirigencia.
Por As.com
El 2019 fue una temporada difícil para la U. Una que se explica por la mala conformación de su plantel y las equivocaciones reiteradas de la dirigencia en este aspecto, y en las decisiones relacionadas con el cuerpo técnico.
Y uno de los factores que más complicó a Universidad de Chile durante el año fue la constante tensión que se vivió en su plantel. Primero con Frank Kudelka, quien constantemente se quejó de no tener las condiciones para trabajar, generando roces con el ex gerente deportivo, Sabino Aguad.
De hecho, su salida dio pie también para un conflicto mayor con la llegada entre mentiras de Alfredo Arias. El DT uruguayo, de bajo rendimiento, sumó encontrones no sólo en la ínterna, sino también abiertamente como el que tuvo con Johnny Herera.
Por ello la U debió apostar por Hernán Caputto, el técnico que había traído para hacerse cargo de las divisiones inferiores, y así intentar salvar la categoría. Si bien su rendimiento no fue mejor que el de Arias, el ambiente que generó el ex portero es la razón principal por la que seguirá siendo el DT de la U en 2020.
«Le dio la calma y la concentración que Arias no pudo entregar. Por la forma cómo llegó, el equipo nunca confió en él (Arias) y por eso se trajo a alguien que conoce el club como Hernán, quien le dio un empujón y le devolvió la confianza a los jugadores», cuenta un personero cercano al trabajo del primer equipo de la U.
A lo anterior, se sumó su conocimiento como ex jugador del club y también el tema económico, algo no menor en el momento actual de arcas alicaídas en Universidad de Chile, club en que valoran también que se haya atrevido a tomar el fierro caliente que significó tomar el primer equipo en posiciones de descenso directo.