Ayer se confirmó el octavo fallecimiento de una persona chilena por el COVID-19, y fue una persona en situación de calle de 44 años.
El octavo fallecimiento por coronavirus pone sobre la mesa la realidad que viven miles y lo desamparados que están frente a esta crisis. Ellos no tienen acceso a baños, alcohol gel ni mascarillas, y además un 17% es mayor de 60 años, es decir, población de riesgo en esta pandemia.
Por esto, en Palabra Que Es Noticia conversamos con el director social del Hogar de Cristo, Paulo Egenau, quien pidió armar una mesa a nivel nacional para hablar de estos temas.
«Generemos una mesa a nivel nacional con otras a nivel regional para ir reflexionando y anticipándonos respecto de qué es lo que está pasando con la vida de las personas más vulnerables si es que entran en contacto con el virus. Adultos mayores y personas en situación de calle, entre otros», dijo Egenau. Solicitó además que el plan de invierno se adelante, empezando ojalá mañana mismo cuando comienza abril.
El director social del Hogar de Cristo acusó tener «precariamente distintos tipos» de insumos de seguridad para quienes trabajan cuidando a la población vulnerable, y confirmó que «hasta ayer llevábamos 5 trabajadores, 4 de un programa terapéutico particular y otra persona que estaba vinculada a una residencia de adultos mayores». Por suerte, aclaró: «esta última no alcanzó a establecer contacto con la residencia».