“Estaba loco. Estaba tan enfermo y no tenía idea de que estaba tan enfermo”, dijo respecto a sus locos días en los ’90.
Hace un tiempo que Mike Tyson, el ex campeón mundial de pesos pesados, viene realizando el podcast Hotboxing, espacio en el que ha revelado detalles desconocidos de su época de pugilista.
Hace un par de semanas en el mismo programa rompía en llanto al reconocer que está trabajando para ser una persona más humilde y dejar atrás el “infierno” que era ser el otro Tyson, pero lo difícil que era. “Me siento vacío, no soy nada”, decía.
“Estoy trabajando en ser el arte de la humildad. Esa es la razón por la que estoy llorando, porque ya no soy esa persona y lo extraño (…) No quiero que esa persona salga. Porque si sale, el infierno saldrá con él. Puede parecer que soy un tipo duro, pero odio a ese tipo, le tengo miedo”, dijo en esa oportunidad.
Ahora el estadounidense de 53 años reconoció que en la década de los ’90, donde el dinero y la fama era cosa de todos los días, se la pasaba en fiestas y orgías, el dinero le daba acceso a prácticamente todo.
“En Las Vegas tenía acceso al VIP de los clubes nocturnos y tenía una prostituta que era mi novia”, dijo para luego admitir que “cuando era joven, era un animal con dinero. Le daba dinero a la gente, a todos, festejaba con todos y tenía sexo con sus madres, sus hermanas y sus primas… orgías”, señaló.
Sin embargo, con la distancia de los años, Tyson admite que no fue una buena época. “Estaba loco. Estaba tan enfermo y no tenía idea de que estaba tan enfermo”, señaló.