El economista Marco Kremerman dice que si «el estado fuera coherente con las métricas que establece», «uno esperaría que un hogar tuviera ingresos asegurados de $450 mil» en medio de esta pandemia.
Muchos chilenos están en la incertidumbre por cómo seguir con su vida en medio de esta crisis, y cómo será todo cuando la pandemia termine. Entre despidos, reducciones salariales, cobros del seguro de cesantía y pérdidas en los fondos de pensiones, el impacto económico que esto tendrá en todos en innegable, y por eso esta mañana en Palabra Que Es Noticia lo analizamos con el economista e investigador de la Fundación Sol, Marco Kremerman.
Según el economista, recién a fines de mayo se tendrá el indicador que logra medir con fuerza lo que pasa en marzo, ya que el INE publica estas cifras con rezago. Pero aún así, pronostica que “la tasa de desempleo abierta va a llegar probablemente sobre el 9%”, y que «la tasa de desempleo integral (que contempla el desempleo abierto, oculto y el subempleo) podría llegar a un 20%”.
Kremerman cuenta que presidentes en el extranjero han valorado los servicios públicos, la previsión y cuidar a las personas antes que a la economía. Esto “tiene que ver con cuán dogmáticos son los gobiernos con la aplicación de políticas que venían aplicando anteriormente”, indicó. Según él, en Chile el gobierno es “muy dogmático”, y no es “fuerte en intervenir mercados”.
Consultado sobre si es necesario asegurar ingresos en medio de esta emergencia mediante una renta básica, el investigador de la Fundación Sol fue tajante: se va a tener que hacer eso. Varios países que “jamás habían pensado en hacer aquello, lo están haciendo por obligación y para cuidar a los ciudadanos y ciudadanas”, explicó Marco Kremerman. “Sino, esto va a generar un reventón social enorme, incluso mayor que el del 18 de octubre, por la necesidad concreta de no poder satisfacer necesidades básicas”, agregó.
¿Y cuánto sería un monto adecuado? El economista dice que, si «el estado fuera coherente con las métricas que establece», uno podría esperar que la línea de la pobreza ($450 mil pesos en febrero de este año) sean los «ingresos asegurados» que tuviera «un hogar promedio».
Sobre el tema, Kremerman profundizó: «Una renta básica temporal es fundamental porque hay muchos hogares que dependen del trabajo sin contrato y otros, cuando pase la tasa de reemplazo que cubre el 70% de los salarios, la única manera de tener ingresos va a ser esa (la renta básica temporal)».
Por último criticó a los bancos, que están recibiendo financiamiento al 0,5% del Banco Central, y cuando alguien hoy realiza un depósito a plazo «con suerte se le está colocando una taza del 2% al año». «Pero si hay una persona que va a pedir un crédito de consumo, las tasas llegan a ser 10 o 12 veces mayores que la de los depósitos a plazo».