El joven ha recibido ofertas millonarias de muchas empresa interesadas en el proyecto.
Con solo 17 años, Avi Schiffmann se ha convertido en uno de los creadores más solicitados en la crisis de coronavirus a nivel mundial. El adolescente estadounidense ideó «nCoV2019.live», el mayor rastreador web de casos de Covid-19 del planeta.
El joven explicó que su objetivo fue crear una manera fácil de rastrear los casos de coronavirus, ya que se dio cuenta que era algo muy complicado al tener que acudir a fuentes de China para obtener datos oficiales. Así que lo que hizo fue extraer las cifras y añadirlas a una base de datos mucho más amplia.
Así nació nCoV2019.live, la página web donde se pueden comprobar los datos, por países, al momento y con datos actualizados a diario. «Lo hago para cada uno de los países, yo solo quiero que la gente pueda obtener la información con tan solo echar un vistazo», dijo al portal QuickTake. Y así es, con solo buscar un país, se puede ver el total de casos confirmados, de fallecidos, de casos más graves y de casos recuperados.
Como era de esperar, la página web ha sido todo un éxito, y el número de visitas no hace más que crecer. «En total tendré como 350 millones de visitas, unos 30 millones a diario», afirmó el joven.
El adolescente ya está en la mira de varias empresas, que ya le han ofrecido colocar anuncios en la web y monetizar el espacio para sacar rendimiento económico, llegando a ofrecerle millones de dólares si aceptaba hacerlo, pero él no quiere beneficiarse económicamente.
«Me acuerdo perfectamente, vino un momento y me dijo ‘he recibido emails de empresas que quieren poner anuncios en mi página web; es más, una de ellas me está ofreciendo ocho millones de dólares’. Y luego me dijo que los había rechazado», recordó su madre.
Avi reveló que rechazó esas ofertas por una sencilla razón: no quería tener tanto dinero siendo tan joven. «Creo que es muy fácil para mi rechazar este tipo de cosas, porque tampoco tengo mucho interés en ganar grandes cantidades de dinero. Me sentiría como muy adulto. Podría decir, vale, me jubilo ya; pero no me quiero jubilar con 17 años», explicó el adolescente, que asegura que todavía tiene mucho por hacer y aprender antes de que eso suceda. «La mitad de las cosas que he hecho ni las sabía antes de empezar a programar», agregó.
«Es divertido ser un adolescente normal, a veces se me olvida que dirijo una de las mayores páginas web del mundo», finalizó el joven desde su hogar.