Una imagen de una mujer en ropa interior o en traje de baño se muestra 1,6 veces más que una similar pero con más ropa.
Entre las redes sociales, Instagram se destaca por ser el servicio dedicado especialmente a las fotografías. Siendo así, no es extraño que su algoritmo esté diseñado para destacar a unas por sobre otras.
Ahora, un estudio del diario digital Mediapart, en colaboración con la Red Europea de Periodismo de Datos y Algorithm Watch, ha comprobado que Instagram da prioridad de difusión a las imágenes de mujeres y hombres con poca ropa.
De acuerdo a la investigación, una fotografía de una mujer en ropa interior o en traje de baño se muestra 1,6 veces más que la misma imagen pero con más ropa, tasa que es 1,3 veces superior en el caso de los hombres.
Instagram, que desde 2012 pertenece a Facebook, también tiene en cuenta el color de la piel de las personas que aparecen en las imágenes para darles prioridad.
A partir del estudio de una patente de algoritmo registrada en 2015 por dos empleados de Facebook, que permite comprender a qué fotografías acuerda o deniega Instagram más visibilidad, se han analizado 2.400 contenidos -con 1.737 imágenes- publicados entre febrero y mayo de 2020.
La citada patente muestra que la plataforma evalúa automáticamente cada imagen colgada en la web y le atribuye una «puntuación de compromiso» (engagement) en función de las posibilidades de que los usuarios de la red social interactúen con el contenido.
«La patente establece específicamente que el género, la etnia y el ‘estado de desnudez’ de las personas en la foto puede utilizarse para computar las métricas de interacción», indican los autores del estudio, liderado por los periodistas Judith Duportail y Nicolas Kayser-Bril.
Los investigadores trabajaron con 26 voluntarios que usaron aplicaciones informáticas para recabar información de los contenidos visionados, de un total de 2.400 publicaciones de 37 personas de 12 países diferentes que utilizan profesionalmente Instagram para anunciar sus marcas, especialmente en sectores como la alimentación, el turismo, el deporte, la moda o la belleza, consigan ABC.
De esta forma, las publicaciones que contenían fotos de mujeres en ropa interior o en bikini tenían un 54 % más de posibilidades de aparecer en el muro de los voluntarios y las de hombres con el torso desnudo un 28 % más, mientras que las de paisajes o comida tenían un 60 % menos de opciones de ser promocionadas en la red social.
No obstante, reconocen que es posible que la variable de desnudez no se aplique a todos los usuarios de la red social, ya que Instagram ofrecía contenido más diverso a «un pequeño porcentaje» de los voluntarios del estudio. «Es probable que el algoritmo de Instagram favorezca la desnudez en general, pero que la personalización u otros factores limiten este efecto para algunos usuarios», dicen los autores, que señalan que sin acceso a los servidores internos de Facebook «siempre será imposible llegar a conclusiones definitivas».