Hasta la fecha, el coronavirus ha contagiado a más de 14 millones de personas a nivel mundial y le ha costado la vida a más de 610.000. Uno de los escenarios más tristes y crudos de esta pandemia es que los pacientes quedan aislados en los hospitales y sus familiares no pueden darle el último adiós.
Jihad Al-Suwaiti es un joven palestino que al verse impedido de acercarse a su madre, que estaba hospitalizada luego de dar positivo de Covid-19, escaló hasta la ventana de la habitación de la unidad de cuidados intensivos en que se encontraba para despedirse de ella por última vez, según recoge El Mundo.
La historia de Al-Suwaiti ha dado la vuelta al mundo luego que fotos de él subiendo por las paredes de Hebron State Hospital en la ciudad de Beit Awa, en Hebrón, al sur de Cisjordania se viralizaran a través de las redes sociales.
La mujer, de 73 años, falleció poco después de recibir la inesperada visita de su hijo, quien la miraba a través de la ventana de la habitación. Una muestra de los terrible que es esta enfermedad, la que además de quitarle la vida a los seres queridos no permite dar un último abrazo.