La actividad en Twitter puede ser muy útil para los científicos, especialmente para analizar los rasgos de personalidad de los usuarios. Pero no solo eso, ya que además el número de tweets, la cantidad de “likes” y el uso de ciertas palabras, pueden revelar posibles enfermedades mentales.
Según un estudio de un grupo de investigadores japoneses comandados por Masahiko Haruno y Kazuma Mori del Instituto Nacional de Tecnología de la Información y las Comunicaciones de Japón, la actividad en Twitter puede predecir las personalidades sociales (por ejemplo, nuestro nivel de extraversión) y la salud mental (por ejemplo, rasgos de ansiedad).
La investigación de Haruno y Mori, que fue publicada en la revista científica Journal of Personality, descubrió que una amplia gama de rasgos y atributos de personalidad pueden predecirse analizando cuatro tipos diferentes de comportamientos de los usuarios en Twitter: características de la red, tiempo de uso, estadísticas de palabras y uso de palabras.
Usando un análisis estadístico, encontraron correlaciones significativas entre las puntuaciones medidas de personalidad y atributos y las predicciones. Los valores obtenidos, por el momento, no son suficientes para determinar con precisión los rasgos de personalidad de un individuo, pero con una muestra de población suficientemente grande, esta tecnología puede proporcionar resultados mucho más ajustados.
El estudio realizado recogió información de los medios sociales de 239 participantes (156 hombres y 83 mujeres con una edad media de 22,4 años) que también hicieron pruebas de personalidad que midieron 24 rasgos y atributos de personalidad, según consigna El Confidencial.
De las 52 subescalas utilizadas, la información de Twitter pudo utilizarse de manera fiable para predecir 23 de ellas. El análisis reveló que varios rasgos de personalidad social, como la extraversión, la empatía y el autismo podían predecirse a partir de las características de la red.
Otros rasgos de personalidad como el estatus socioeconómico, el fumar/beber, e incluso la depresión o la esquizofrenia eran predecibles a partir de las características de uso del lenguaje.
La predicción a partir del tiempo era más difícil de correlacionar con las personalidades medidas, pero sí mostraba una correlación significativa con la inteligencia y la orientación de los valores sociales.