Víctor Pérez, descartó que su visita a La Araucanía durante el viernes pasado haya sido una provocación y que fuera el caldo de cultivo para los hechos de violencia que se registraron durante el fin de semana.
Al respecto, el ministro del Interior comentó que dicha postura tiene un afán de justificar y validar la violencia: «Indudablemente, la visita de un ministro del Interior a un lugar y la expresión de un hecho evidente, claro e indesmentible, de que aquí en Chile no hay presos políticos, (porque) todas las personas que están detenidas lo están por resoluciones de los tribunales de Justicia, no puede ser una provocación».
Pérez recalcó: «Yo no fui a provocar a nadie. Fui a iniciar un trabajo de diálogo, de respaldar y fortalecer la acción de las policías, de Carabineros y PDI que resguardan a todos los chilenos y en eso vamos a perseverar».
En cuanto a los gritos de corte racista en contra de la comunidad mapuche, mientras se desarrollaban los hechos de violencia, el secretario de Estado expuso que «soy absolutamente antiracista. Todos los gritos que tengan esa connotación, venga de donde venga, son rechazados. Somos un país, somos chilenos y chilenas y que tenemos que trabajar unidos en esa materia».