Michael Chapman, cinematógrafo nominado a los premios de la Academia por su trabajo en la dirección de fotografía de los clásicos de Martin Scorsese «Taxi Driver» y «Toro Salvaje», falleció el pasado 20 de septiembre a los 84 años de una insuficiencia cardiaca. La noticia fue confirmada por su esposa, la directora Amy Holden, en su página de Facebook.
El aclamado cineasta estaba retirado al momento de morir. Su trabajo fue clave en aquella época dorada para el cine norteamericano de los 70s, dándole su visión a películas de directores de la talla de Martin Scorsese en las ya mencionadas, Francis Ford Coppola en “El Padrino” y Steven Spielberg en “Tiburón”.
Tras Taxi Driver, Champan recibió el apodo de “el poeta de las aceras”, por su brillante trabajo al relatar la tragedia callejera de Travis Bickle. Mientras que la última película que tuvo el honor de contar con él en su equipo fue la fantástica “El mundo mágico de Terabithia” del 2007.
Chapman no sólo trabajó como cinematógrafo para otros directores. Estuvo a cargo de varios proyectos como director, como el famoso concierto en vivo “Live in Athens 1987” de Peter Gabriel.
La triste noticia repercutió en el mundo del cine, donde Scorsese, su más frecuente y cercano colaborador lo recordó. “Me considero muy afortunado de haber podido trabajar con Michael Chapman. Michael y yo hicimos tres filmes juntos -‘Taxi Driver’, ‘El Último Vals’ y ‘Toro Salvaje’-, y él le dio algo único e irremplazable a cada una de ellas”, señaló en un comunicado.