Hoy en Palabra Que Es Noticia conversamos con Matías Cociña, doctor en Sociología, Investigador del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo en Chile (PNUD) sobre un estudio que da cuenta de una lamentable realidad: Casi un 60% de los hogares chilenos ha reducido sus ingresos durante esta pandemia.
El sociólogo dice que “el impacto de la crisis, al contrario de otras crisis económicas, es transversal. No les pegó sólo a los sectores de menores ingresos: pega en todos los quintiles, porque hay sectores completos de la economía que cerraron y el impacto se siente en todos los niveles socioeconómicos con actividades vinculadas a esos sectores”.
Pero “pese a que el golpe fue transversal, interactúa con las desigualdades preexistentes”, precisa.
Por tanto, Cociña explica que “la recuperación va a ser muy desigual, porque un hogar que perdió parte de sus ingresos pero perdió parte de sus ahorros está en una situación distinta a uno sin ahorros pero que tuvo que endeudarse”. “Algunos se endeudan con familiares y amigos, y los sectores más altos con la banca”.
Y hay un factor de género importante en lo que reporta la encuesta del PNUD: “Las mujeres y los hombres están perdiendo empleos más o menos a la misma tasa, pero 59% de las mujeres no estaban trabajando ni buscando empleo al ser consultados pero ese porcentaje en los hombres es de un 38%. O sea, los hombres están buscando o regresando al trabajo, y eso abre la brecha de género en términos de desempleo y pobreza”.
¿Ayudaría una reactivación económica? “Sin duda la reactivación es probablemente, junto con el control sanitario de la pandemia, la prioridad en el sentido de que cuando el 60% de los hogares dice que no les alcanzan los ingresos junto con una proporción importante donde se redujo el número de personas que están trabajando se da una cascada de consecuencias”, responde Matías Cociña.