De la manera más injusta posible, Chile cayó anoche ante Uruguay en la Montevideo por 2-1.
La Roja igualaba un encuentro sumamente parejo ante los charrúas hasta el minuto 88, cuando hubo una claro mano en el área uruguaya, pero de una forma inexplicable, el árbitro desestimó el cobro y ni siquiera fue a revisar el VAR.
En la primera mitad del partido, el colegiado no tuvo problemas para ir a ver una dudosa mano en el área de Chile, que terminó siendo penal y posteriormente tanto de Luis Suárez.
La Roja se fue con una derrota, pero con la sensación de que claramente podría haber sido una victoria, aunque claro, el árbitro no lo quiso así.