En los 80, los rockstar vivían del descontrol. Sexo, drogas y Rock & Roll era el eslogan de vida y se vivía acorde. Ahora, a cuarenta años de aquella época de gloria, los resultados de estos excesos siguen golpeando a algunas estrellas de la época, como es el caso de Tommy Lee.
Tras un paso por rehabilitación y un periodo de un año de sobriedad, Tommy conversó con Yahoo! sobre la gravedad de su problema con el alcohol. En la entrevista reconoció que llegó a un punto en el que bebía dos galones (7 litros, aprox.) de vodka al día. La recaída se dio tras el último tour de Mötley Crüe, según Lee, debido al “cansancio y no tener nada más que hacer”. Previo a esto, Lee estuvo cuatro años sobrio.
“Estuve todo este tiempo en casa, no en tour. Hice lo que te dije, simplemente me gustaba estar en casa. Literalmente no hacía nada, sólo daba vueltas por ahí bebiendo”, recuerda el baterista. “No me di cuenta hasta casi el final. Fue como ‘Oh, loco, tienes que parar. Esto es una locura. Estaba tomando de aburrimiento, podía simplemente despertar y ya estar haciéndome un vaso de casi puro vodka con una pizca de limonada. Me tomaba dos galones – no vasos, no cortos, sino que galones de los grandes. – en un día”, agrega.
Tommy explica que en un momento pensó que esa cantidad de alcohol lo podría matar. Sin embargo, el tomar no le hacía nada, así que se sentía inmune. De acuerdo a él, su último chequeo médico salió bien y su doctor le dijo que su hígado estaba «súper saludable».
La elección de Lee de rehabilitarse vino tras la preocupación de su esposa por estas inmensas cantidades de alcohol. Aún no sabemos si será algo permanente o si volverá a recaer, pero por ahora, él dice que “hoy no beberé vodka”.