Que AC/DC, y contra cualquier pronóstico, nos regale un nuevo álbum en este 2020, es tan alucinante como lo que dicen sobre el infierno, que no es un mal lugar para vivir.
Los australianos están de vuelta y hoy 13 de noviembre nos sorprenden con «Power Up«, su álbum número 17 en estudio y que además llega con ex miembros, Cliff Williams, Phil Rudd y la inconfundible voz de Brian Johnson, lo que hace que la emoción sea doble.
Muchos fanáticos de este querido rock and roll habíamos perdido las esperanzas con el futuro de AC/DC. Por un lado la sordera de Brian, remplazado en el cierre de la gira de «Rock Or Bust» por Axl Rose, y luego la muerte de Malcolm Young.
Si bien la voz de Guns N’ Roses no lo hizo mal y recibió muchos aplausos, para los acérrimos fue inaceptable porque no representaba la esencia de este grupo fundado en 1973. Eso, sumado a la triste noticia sobre la muerte del mítico guitarrista rítmico, fundador y compositor de la banda nos hacía anticipar que AC/DC tenía sus días contados.
Pero claro, todos sabemos que el rock renace de las cenizas y de alguna forma es lo que paso con AC/DC. Vimos algunas luces esperanzadoras cuando se filtraron fotos y comentarios sobre una nueva producción, para la que la banda estaba trabajando, pero no había nada claro hasta que en este pandémico año nos llega esta placa de 12 temas donde la banda curiosamente no usa la palabra «rock» en sus títulos.
Escuchar los primeros acordes de «Realize«, pasar luego por «Shot in the Dark«, «Witch Spell», «Demon Fire» (mi favorita), y cerrar con «Code Red» nos hacen sentir como siempre, como cada una de las veces en que hemos puesto un álbum de AC/DC en nuestras maquinas, cuando esa energía atrapa y entra por tu pie, marcando el ritmo, para luego desplazarse por tu cuerpo hasta las tripas, donde está la esencia de este simple y querido rock and roll.
Salúd y gracias por este regreso, por recargarnos con buena música, con energía, con el clásico sonido de AC/DC.