Esta semana, Alemania alcanzó su peak máximo de contagios de coronavirus. Fue el jueves, cuando se registraron 23.542 casos en solo 24 horas, lo que hace que el país acumule más de 750.000 casos positivos desde el inicio de la pandemia y alrededor de 12.200 muertos. De ahí que el gobierno de Angela Merkel haya decidido imponer fuertes medidas de restricción para que el virus no se propague o lo haga lo menos posible. A mediados de octubre la canciller pidió a sus compatriotas que se quedaran en casa, redujeran sus contactos y no hicieran viajes. Desde comienzosde noviembre, los bares permanecen cerrados y los restaurantes solo sirven comida para llevar. Todas las actividades culturales, gimnasios, cines, museos… están clausurados este mes.
Sin embargo, no todo el mundo está dispuesto a hacer sacrificios para contener la pandemia. Al menos no lo va a hacer el equipo que rueda en Berlín una nueva versión de la película de ciencia ficción Matrix, entre quienes se encuentran las directoras (las hermanas Wachowski) y los protagonistas, como Keanu Reeves en el papel de Neo, y Carrie Anne Moss, en el de Trinity.
Ahora se supo que dicho equipo decidió saltarse todas las normas y toda la lógica y dar una gran fiesta en Potsdam, a unos 45 minutos de Berlín. Según contó en exclusiva el diario alemán Bild, hasta 200 personas del equipo se juntaron en el Studio Babelsberg de la ciudad, donde no dudaron en festejar a lo grande. De hecho, uno de los invitados le ha contado al diario que la fiesta “fue exuberante”. También explica que se hacían tests rápidos de covid “a todos por adelantado. Todo el mundo debía venir con mascarilla, pero muchos no la llevaban puesta después”. Algo que se puede apreciar en las fotos del diario, donde hay gente que las lleva y otros que no, pero donde se ve a una gran cantidad de personas muy juntas congregadas frente a un escenario.
Hubo un dj con música en directo, que animó una concurrida pista de baile, con espectáculo de danza incluido. También había caravanas donde se hacían tatuajes, así como tiendas de estilo beduino para descansar. Todo ello regado con vino, sake, sushi, un puesto de postres… para acabar con un gran espectáculo pirotécnico. El evento, que no cumpliría con las restricciones del país, llegó a tener un nombre secreto: «El evento del equipo de helados». El ayuntamiento de Potsdam no tenía constancia de la fiesta, y los eventos de este tipo solo pueden celebrarse bajo registro, con medidas de higiene aprobadas y no más de 50 personas.
Según el diario alemán, las hermanas Wachowski, creadoras de la saga, no faltaron a la fiesta. Tampoco lo hizo Reeves, que estuvo acompañado de su pareja, la artista Alexandra Grant. Un escándalo de tal proporciones que, aunque Warner Bros prefirió no aludir al respecto, la portavoz del estudio tuvo que salir a dar su versión, afirmando que se trataba de un momento del rodaje. «Según el departamento de producción, era el último día de rodaje. Era una escena de celebración. Se adecuaron a las normas de higiene. La producción colocó deliberadamente esta escena, con tanta gente implicada, al final del rodaje», aseguró, pero según el Bild durante la fiesta no hubo ningún tipo de filmación.