Hoy, Syd Barrett hubiese cumplido 75 años, y su pérdida se sigue sintiendo como si fuese ayer. Aquejado por la diabetes y un cáncer al páncreas, Roger Keith Barrett falleció a los 60 años casi en el olvido, completamente alejado de la música y de la vida pública.
Si bien el músico dejó atrás su carrera y se sumergió en un retiro prematuro, su espíritu siguió rondando los pasos de la banda, como ese germen necesario para una de las historias con más épica que hayamos visto en el rock.
Sí, se le sigue extrañando al “loco diamante”. Y por eso, elegimos 5 de sus grandes canciones, tanto en Pink Floyd como en su breve carrera como solista.
BIKE
La que cierra el debut de Pink Floyd, “The Piper At The Gates Of Dawn” de 1967, es un ejercicio puro de sicodelia. Tiene a un ratón indigente, tipos de barba de jengibre y una bicicleta prestada. Se descompone con varios loops al cierre, listos para un siguiente viaje. Es irresistible e ideal para pedalear.
OCTOPUS
Bajo otro nombre, “Octopus” fue una de las primeras canciones que Barrett escribió tras dejar Pink Floyd. Sus problemas siquiátricos y de abuso de drogas retrasaron la grabación de su primer disco como solista. Y esta, que fue el single que precedió al LP “The madcap Laughs”, demostró que su cabeza ya estaba en otro lugar, algo alejado de fines de los 60.
ASTRONOMY DOMINE
La que abre “The Piper At the Gates Of Dawn” define el camino que Pink Floyd tomó desde el principio de los tiempos: tener espacios para hacer lo que quisieran, con áreas de improvisación que siguieron ocupando años después de que Barrett se fuera del conjunto. Una verdadera pieza de arte sobre un viaje al universo sin retorno.
DOMINOES
Incluida en el álbum “Barrett” de 1970, “Dominoes” nos presenta imágenes de lamento y nostalgia en su letra. En el track, hace alusión a un tema de The Turtles para aludir a un quiebre amoroso, y una sensación de angustia evidente. Profunda e inquietante.
JUGBAND BLUES
La última canción de Barrett con Pink Floyd es el único track suyo en “A Saurcerful of Secrets” es un vistazo descarnado al momento que vivía el músico, cada vez más alienado de todo con sus compañeros empezando a dejarlo de lado. Se hace una declaración crítica de la situación y un repaso por su cabeza.