“Debería haber existido una sola comunicación país, que no hablen los alcaldes: una sola vocería. Que haya una mirada de Estado (…) que supere a las personas”, dice la candidata a constituyente.
Hoy en Palabra Que Es Noticia conversamos con Beatriz Sánchez, candidata a la Convención Constitucional por el distrito 9.
Consultada por el Avifavir, el medicamento ruso impulsado por Daniel Jadue, prefirió evadir el tema: “No me voy a meter en eso, pero sí creo que todas estas informaciones que se van entregando por uno u otro lado no le hacen bien a la comunicación de riesgo. Para todo debería haber existido una sola comunicación país, que no hablen los alcaldes, una sola vocería. Que haya una mirada de Estado desde el municipio y desde los parlamentarios que supere a las personas, una vocería que hable respecto de qué se hace”, opina la excandidata presidencial.
A propósito de esa carrera a la que se subió años atrás, Sánchez se refiere a las actuales candidaturas: “No sé de dónde sale este presidencialismo. No hay ninguna pregunta en las calles del tema presidencial, a nadie le importa, nadie sabe muy bien quién es y quién no es candidato o candidata”.
“La gente sabe que estamos en un proceso constituyente y hace muy bien la diferencia entre qué cosas son y cuáles no de la constitución (…). Que haya tantos candidatos presidenciales quiere decir que el tema está aún abierto y no cerrado, y obedece a que aún falta mucho tiempo para que haya definiciones en ese sentido”, critica la candidata a constituyente.
Debatir ideas, no nombres
Según Beatriz Sánchez, “nos hemos acostumbrado a hablar de personas y no de ideas (…). Acá habrá choques de ideas respecto del futuro del país entre bloques políticos. La elección del 11 A enfrentará ideas país en concreto que tenemos para un futuro, y eso nos enfrenta”.
“Tener ese debate en los medios de comunicación es más complejo, y no se quiere dar. Se develarán intereses, pondrán cosas sobre la mesa, pero a mi gusto esta es la elección más importante de esta generación: vamos a definir el futuro de los próximos 50 años, las líneas del juego”, elucubra la frenteamplista.