Hoy en Palabra Que Es Noticia conversamos con Carlos Meléndez, sociólogo, doctor en Ciencia Política y autor del libro “El Mal Menor: Vínculos Políticos en el Perú Posterior al Colapso del Sistema de Partidos” sobre el “vacunagate” en Perú.
Así lo contextualiza: “Perú los últimos años ha vivido una crisis política tremenda, y en pandemia no ha parado: se ha agudizado. En plena pandemia hemos tenido 3 presidentes y 4 ministros de Salud, y la ola de contagios ahora es mayor a la de la primera ola”.
“En el ministerio de Salud han caído 50 altos funcionarios y en Cancillería 8. El escándalo social llega en el peor momento de la segunda ola en el Perú”, agrega Meléndez respecto del escándalo que tiene a autoridades y figuras públicas vacunándose irregularmente antes que el resto de la población.
Hasta los más buenos están metidos
Según el doctor en Ciencia Política peruano, todo esto “ha sido un golpe a la moral de los peruanos, porque no se trata de cualquier funcionario público: Martín Vizcarra y Pilar Mazzetti eran autoridades muy reconocidas y queridas por el pueblo. Vizcarra alcanzó a tener un 80% de popularidad pese a la crisis política, y Mazzetti era la ministra que permanecía en el cargo sucediese lo que sucediese con la presidencia de la república”.
“Esto agrava aún más la decepción, y lo peor es que estamos en un contexto electoral: el 11 de abril en el Perú también (al igual que en Chile) hay elecciones, y hasta el momento ninguno de los candidatos a la presidencia pasa del 11% de intención de voto”, precisa Carlos Meléndez.
Lamentablemente, es una cuestión que no sólo ha pasado en Perú. De hecho en Chile hay polémicas similares, y así lo indica el sociólogo: “Estuve en Ecuador hace una semana observando las elecciones, y también hubo casos en que el ministro de Salud favoreció a los suyos. La diferencia con el caso peruano es la magnitud de los involucrados, y además una suerte de organización de esta ‘vacunación VIP’ porque tienes a científicos y académicos encargados de la experimentación y aplicación de las vacunas que funcionaban como traficantes de vacunas”.
“Eran una suerte de ‘dealers’ que repartían las vacunas para obtener algunas preferencias, y esto también parece involucrar casos de conflicto de interés. Todo genera sospechas de que estas vacunas se repartían con el fin de que algunas empresas y laboratorios internacionales ganaran la buena pro del gobierno peruano para adquirir masivamente estos productos”, agrega Meléndez.
La guinda de la torta
Un datazo que nos da el doctor en Ciencia Política tiene que ver con que la iglesia también es parte de este escándalo: “El nuncio apostólico del Perú también participó de esta vacunación irregular aduciendo a que era ‘consultor ético’ (…), entonces esto es muy lamentable. No existe otra palabra, y por eso ha golpeado tanto la moral de los peruanos”, cuenta.