A 43 años de su estreno en cines, ahora los internautas piden cancelar «Grease». ¿La razón? consideran que la película de 1978 está plagada de «racismo», «sexismo» y «homofobia».
La polémica comenzó a inicios de este año, cuando la BBC programó la película que acpa cponocimos como «Grease: Brillantina» sin pensar en que provocarían una gran controversia. Y tras la proyección, muchos usuarios encontraron en Twitter el escenario perfecto para quejarse de las conductas que ahora son consideradas inapropiadas.
Entre los comentarios que colmaron las redes sociales, resaltaron aquellos en los que catalogaron al filme protagonizado por Olivia Newton-John y John Travolta como «racista», «sexista», «agresiva sexual» y hasta «homofóbica», según consigna Concierto.cl. «Grease apesta en muchos niveles y el mensaje es pura misoginia» o «Es la pieza de mierda más sexista». Son dos de las opiniones que retomaron desde el Daily Mail.
Las escenas por las que «Grease» estaría incomodando
El mismo rotativo destacó que hay dos escenas que generaron especial incomodidad.
Una, en la que uno de los amigos de Danny intenta ver debajo de las faldas de sus compañeras.
Y la otra, cuando en la canción «Summer Nights» insinúan que Sandy pudo resistirse a su encuentro romántico.
En Twitter los usuarios también mostraron su enojo por el comportamiento de Betty Rizzo, interpretado por Stockard Channing, acusado de criticar a Sandy con el tema musical «Look At Me I’m Sandra D».
Este mismo personaje también es atacado porque en «Grease» es marginada por sostener relaciones con varios hombres y especialmente con T-Bird Kenickie sin condón. Esto la lleva a pensar que podría quedar embarazada.
El abordamiento de la homosexualidad tampoco gustó a las nuevas generaciones, ya que el personaje de Vince Fontaine fue duramente criticado.
El contexto en que se estrenó la película
A pesar de las críticas, hay que tomas en cuenta que la película se estrenó en 1978. Está ambientada en una escuela secundaria de 1958. En esta época la homosexualidad aún no era despenalizada en Estados Unidos.
Al respecto, Olivia Newton-John ya se pronunció sobre esta situación según el Daily Mail: «Es una película y una historia divertida y nunca me lo he tomado demasiado en serio».