Hoy en Palabra Que Es Noticia conversamos con el cientista político y académico de la UDP, Claudio Fuentes.
El primer sondeo tras la primera vuelta en Perú, el candidato de izquierda, Pedro Castillo, saca 11 puntos de ventaja a Keiko Fujimori y el mercado local se desploma. El candidato de izquierda obtuvo un 42% de respaldo, mientras que la hija del encarcelado exmandatario Alberto Fujimori recibió un 31% de apoyo, reveló la encuestadora Ipsos.
¿Cómo se puede proyectar el panorama en Chile, donde tal como sucedió en Perú, siguen apareciendo candidatos presidenciales que van fragmentando la escena política?
Fuentes reflexiona: “Chile como sistema político está camino hacia lo que está pasando en Perú, hablaría de una peruanización de la política chilena en ese sentido. La cantidad de candidaturas en Perú fueron 18, donde el máximo sacó 19%. Hay una fragmentación muy alta, pero también está el convertir a la primera vuelta en una primaria, que luego te lleva a segunda vuelta. Esa lógica está llegando a Chile”.
Descontento de la democracia en América Latina
“En el mundo tenemos una crisis de pérdida o descontento de la democracia muy alta. En América Latina y Europa se nota este fenómeno. Hay menos relatos ideológicos claros y un alza del populismo. Este populismo se asocia a líderes carismáticos, donde la apuesta es un intento de reunir adhesiones a partir de un conflicto con las élites. La segunda característica es el individualismo, de hacer creer que vas a resolver los problemas de la humanidad fuera del sistema político. Esa lógica de discurso es la que tienen los líderes populistas y acá en Chile se acentúa con los incentivos del propio sistema. Se ponen delantal blanco, se dicen independientes, con promesas injustificadas”, argumenta el cientista político.
Gobierno sin rumbo en Chile
Claudio Fuentes siente que “el Gobierno perdió el rumbo respecto a la situación política y social. Hay problemas del Estado de llegar urgente con ayuda, la precariedad de la población, los bajos montos de ayuda y la falta de indolencia de las élites. Hay una élite que no entiende el problema en el que vive. La percepción ciudadana suma a empresarios, políticos, etc. Entonces eso va generando mucho más rabia y el Gobierno no lo ha entendido. Hay un despliegue comunicacional absurdo en términos de explicar lo inexplicable y todos se desmarcan, incluso su propio sector político, de sus decisiones”.
“No se entiende mucho al Gobierno, cuando sabe que no tiene respaldo del Congreso y presenta un requerimiento al TC sin presentar una propuesta alternativa que te permita enfrentar el temporal que estamos viviendo con esta pandemia. Un presidente aislado que insiste tozudamente con sus políticas, no lo entiendo. Esto es un polvorín en términos sociales, que genera desconfianza, rabia, actos de violencia. Hay un problema con la legitimidad de las instituciones. Se vive el síndrome del “pato cojo” y la política dentro de Chile Vamos va a ser desmarcarse del presidente”, agrega el cientista político.