Solo la primera temporada costará más de 400 millones de dólares
Amazon está realizando y produciendo una serie basada en los libros de J.R.R Tolkien, El Señor de los Anillos y cuando fue anunciada por la empresa, prometió más de 1000 millones de dólares para su realización.
Con esa sola cifra, la producción, que será una precuela situada muchas años antes de los hechos ocurridos en la Tierra Media, será la serie más costosa de la historia, superando incluso a Game of Thrones. La sola primera temporada será más cara que la final de la serie recién enunciada.
Para ser más exactos, la primera temporada de esta nueva adaptación tendrá un presupuesto alrededor de 465 millones de dólares. Esto solo para que te hagas una idea y pongas en perspectiva lo costosa que es.
Si comparamos con la serie más taquillera hasta el momento, que es Game of Thrones, la temporada final de esta costó aproximadamente 15 millones de dólares por episodio. Por lo que la serie de Amazon, supera por mucho esta cifra.
Quien reveló esta información fue The Hollywood Reporter, en medio de numerosos reportes que vinieron desde Nueva Zelanda. Ese país concedió millonarias rebajas de impuestos debido a la inversión de la producción en el país.
En un comienzo, la trilogía dirigida por Peter Jackson costó alrededor de 280 millones de dólares por las tres películas. Incluso considerando los ajustes de la inflación, los más de 450 millones de dólares actuales por una sola temporada están por sobre el costo de aquellas películas.
¿Costo asegura calidad?
Por más millones y millones de dólares que cueste esta producción, eso no asegura que será tan buena como las primeras tres películas. Incluso algunos de los actores de aquella mítica trilogía han salido a criticar la serie.
Elijah Wood, quién encarnó a Frodo en aquellas producciones, comentó en una entrevista para Empire: «Encuentro extraño que hablen de ella [la serie] como ‘El Señor de los Anillos’ porque no es El Señor de los Anillos. Tiene lugar en la Segunda Edad de la Tierra Media».
A él se le suma Viggo Mortensen que, siendo un poco más optimista, declaró que tenía ciertas dudas, pero que la producción «tiene todo lo necesario para hacer un gran trabajo».