Inglaterra goleó por 4-0 este sábado a Ucrania en el Olímpico de Roma para llegar a semifinales de la Eurocopa 2020, donde se medirá con Dinamarca en Wembley, un billete sencillo con Harry Kane de goleador para los ingleses, golpeando en el inicio de cada parte.
Los de Gareth Southgate hacen ya buenos los pronósticos que daban a los inventores del fútbol como favoritos. Con la mejor plantilla que se recuerda, la eterna candidata jugará por tercera vez la semifinal de una Eurocopa, en busca de su primera final, consigna AS.com.
Será el miércoles y lo harán en Wembley, aún mayor aliciente para los ‘Tres Leones’, desatados ante una débil Ucrania e imbatidos en el torneo. Kane y Maguire marcaron muy pronto en cada parte y los de Andriy Shevchenko, novatos en estas lides, se hundieron.
Sterling marcó diferencias también en el primer tiempo y dio la asistencia del 0-1; después de un recorte y cuando parecía que no llegaba al balón, logró dar el pase que nadie esperaba. Kane, que venía de enchufarse ante Alemania, volvió a ver puerta.
El gol fue un tesoro para los ingleses, ya que Ucrania se encerró con todo, pero los de Southgate no tenían ninguna prisa. El rimo lento de Inglaterra estaba justificado aunque necesitaban poco para animarse. Sobre todo Sterling y Shaw por banda izquierda, y en segunda jugada cualquiera con camiseta blanca.
Un misil de Rice también pudo ser el 0-2, mientras que Ucrania logró acercarse con Yarmolenko solo con un error de Walker. Sancho, que entró de titular, tuvo su ocasión y los de Shevchenko se fueron al vestuario impotentes para crear peligro. La charla del mítico delantero de poco sirvió ya que en el primer minuto encajaron.
Maguire remató una falta y poco después Kane cabeceó también sin oposición otra asistencia medida de Luke Shaw. Ucrania, sin recursos para hacer daño a una selección que se sabe cerrar y bien, se hundió con 40 minutos de agonía por delante. Kane tuvo el triplete y en el córner que provocó fue Henderson quien hizo el 0-4.
Tan fiable o más que durante todo el torneo, Inglaterra pudo disfrutar y dosificar camino a semifinales, de regreso a Wembley donde jugó la fase de grupos, ahora en las rondas finales. Los inventores del fútbol vuelven al penúltimo escalón como en 1968 y 1996, un poco más cerca de cantar el ‘football’s coming home’.