El retraso en el estreno de «Blonde» dejó en suspenso a los fanáticos que esperan con ansias ver qué ha hizo Andrew Dominik en su esperada adaptación de la novela de Joyce Carol Oates inspirada en la vida de Marilyn Monroe, a quien encarna Ana de Armas en la interpretación que está llamada a consolidar su estatus de estrella en Hollywood y que podría ponerla en camino a los Oscar.
Precisamente eso es lo que esperaba también Netflix, distribuidores del filme producido por Plan B Entertainment –la productora de Brad Pitt–; que contaba con este proyecto de alto calibre como buque insignia para la próxima temporada de premios. Solo que finalmente no será así, a pesar de que «Blonde» lleva meses terminada; se rodó a finales del verano de 2019, antes de la pandemia, consigna RTVE.
Biopic de Marilyn Monroe se aplaza para 2022
La plataforma aplazó el estreno hasta 2022, postergando un año más esas posibles aspiraciones a los premios. Lo que ha llevado a muchos dentro de la industria a preguntarse por qué. Thierry Frémaux la ha visto –afirmó que era «preciosa»–, pero no la pudo programar fuera de competición en Cannes por la famosa desavenencia entre el festival, los exhibidores franceses y Netflix. Más sorprendió que la cinta no estuviera tampoco en las programaciones de Venecia o Toronto.
Tanto misterio ha llevado a que empiecen a aflorar rumores sobre posibles motivos para la decisión de Netflix. El más insistente señala que Dominik ha realizado una película mucho más atrevida y experimental de lo que la plataforma esperaba que fuera un vehículo estelar hacia los Oscar en la línea de los biopics que suelen encandilar a la Academia. Evidente error de cálculo al tratarse del director de «El asesinato de Jesse James por el cobarde Robert Ford».
«Blonde» sería «demasiado sexual»
Según publicó el periodista cinematográfico Jordan Ruimy en la página World of Reel, el resultado final de «Blonde» podría haberle estallado en la cara a Netflix. Ruimy asegura que el filme iba a estar presente en Venecia pero la plataforma lo sacó en el último momento por una disputa con Dominik sobre el montaje final.
«Ahora mismo, Blonde es un retrato sexualmente explícito de Marilyn Monroe que recibiría calificación para mayores de 18 años. Netflix está absolutamente horrorizada con el montaje que les mandó Dominik, donde se incluye una secuencia de violación y un cunnilingus menstrual sangriento», afirma. «Quieren una versión nueva de la película y Dominik se niega».
«Los ha pillado por sorpresa. Creían que tenían un valor seguro para los Oscar y en realidad se trata de una película de autor, confusa e insensible», sentencia. Según esta fuente, la próxima jugada de la plataforma será mover la película en las futuras ediciones de Sundance o Berlín, pero queda por saber si será esta versión o llegarán a algún acuerdo para realizar cambios.
Una apuesta «muy visual» y «con muy poco diálogo»
El director de «Mátalos suavemente» ya advirtió de que su «Blonde» era una apuesta muy visual y «con muy poco diálogo», a pesar de que consideraba que podía ser su obra más accesible. No obstante, su trabajo en el guion desde 2010 siempre apuntó a disponer de un collage intenso de imágenes y situaciones que contaran la historia de Norma Jean «como la protagonista de un cuento de hadas: una pequeña huérfana perdida en el bosque de Hollywood»
«Es la historia de cómo un trauma infantil da forma a una mujer adulta, dividida entre su yo público y privado», declaraba el cineasta a Collider en 2020. Si esta visión personal sobre uno de los mayores iconos del siglo XX es acorde a lo que Netflix esperaba poder vender es algo que seguirá siendo una incógnita hasta que llegue 2022.