De los duros emplazamientos hechos por el gobernador de Tarapacá, José Miguel Carvajal, quien habló del fracaso del plan Colchane para el control de la migración, conversamos en Palabra Que Es Noticia con el delegado presidencial de la región, Miguel Ángel Quezada.
Recordemos que el gobernador señaló en una entrevista con La Tercera: «Lo único que hemos escuchado es que ha sido exitoso, cuestión que nos parece una falta de respeto. Como no hemos tenido una notificación por parte del ministro de Interior; aprovecharemos la reunión que por primera vez tenemos todos los gobernadores y gobernadoras el jueves con el Presidente. Le vamos a entregar antecedentes de lo que está sucediendo, porque de verdad necesitamos que se llame a la responsabilidad al ministro del Interior, el mismo que estuvo en febrero en Colchane».
Palabras de Miguel Ángel Quezada
«Me parece mezquino el comentario del gobernador desde agosto del 2020 hasta agosto de este año, por pasos no habilitados, han ingresado cerca de 20 mil personas a quienes hemos conducido a Carabineros, los traemos en buses a residencias transitorias, les damos alimentación, resguardo y salud para que salgan de esas residencias y luego con organismos internacionales, como la OIM, hemos hecho todo el aspecto humanitario y los hemos llevado a su reunificación familiar. Las palabras de él no reflejan el trabajo que se ha hecho con 20 mil personas».
«Es verdad, hay carpas en plazas y playas. Estas personas es una cantidad muy pequeña. Es lo mismo que pasa en Santiago cuando pasas por el Mapocho y ves algunas carpas y luego desaparecen. No lo desmentimos, pero no se puede decir que esto está descontrolado. Lo que digo es que es poco feliz el comentario de que esto está descontrolado. Eso no es así».
«Lo que pasa es que hoy día la frontera esta resguardada; se hacen los esfuerzos para que no ingresen, pero los coyotes los ingresan igual al país. En enero o febrero veíamos a gente que llegaba por sus propios medios y ahora estos inescrupulosos son los que los ingresan al país. Y estando en el país, la justicia impide que puedan ser expulsados».