Raíces
El 22 de spetiembre de 1957, nació Nick Cave en Warracknabeal, en el estado australiano de Victoria. Es el tercero de cuatro hijos, su padre Colin Cave y su madre Dawn Cave compartían la misma pasión: las letras. El primero era profesor de literatura y ella trabajó como bibliotecaria. El primer contacto de Nicholas con la música fue a través del cristianismo anglicano, el que fue impuesto por sus padres. Cada semana asistía a la catedral de Wangaratta junto a toda su familia para ser parte del coro infantil.
A pesar de que siempre estuvo ligado a la música y a las letras, lo que le daba herramientas artísticas para desenvolverse, su comportamiento no era bien visto tanto por su escuela como por sus padres, por lo que se mudó a Melbourne para así terminar la secundaria en la Escuela Caufield Grammar. ¿Destino o mera coincidencia? Nunca lo sabremos, pero en ese lugar conocería a la base de su primera banda. Mick Harvey en la guitarra, Tracy Pew en el bajo y Phill Calvert en la batería y de forma periódica los acompañaba Christopher Coyne en el saxofón.
The Boys Next Door
Ese sería el nombre de su primera banda, donde Nick Cave era la voz principal. Al ser un grupo de adolescentes apasionados por el rock británico, sus primeros ensayos y presentaciones fueron covers de clásicos de Lou Reed, David Bowie y Roxy Music, aunque también aprovechaban el espacio e intercalaban algunos temas que eran de su propia autoría. La llegada de otro guitarrista a la banda, Rowland S. Howard, sería el detonante para conseguir sacar adelante su álbum debut titulado Door, Door (1979). La esencia del grupo australiano se basaba en el punk y en las letras expresionistas de Nick.
The Birthday Party
Un año después del lanzamiento de su ópera prima, en el comienzo de los 80’ la banda dejaría Australia en busca de un éxodo, ya que en la escena nacional habían tocado el techo. Londres sería todo un desafío, un lugar donde la industria musical tenía una competencia acérrima. Desde ese instante, cambiaron el nombre a The Birthday Party, y en tierras europeas grabaron 3 álbumes de estudio. El disco homónimo The Birthday Party (1980), Player on Fire (1981) y Junkyard (1982). Si bien con estos discos pudieron posicionarse en el mercado musical británico, siempre existió tensión entre Cave y Howard. Esto junto al incesante problema con las drogas del que padecía parte del grupo, llevó a disolver la banda en 1984.
The Bad Seeds
La tercera es la vencida. Nick Cave y Mick Harvey comenzaron una nueva incursión musical, la cual estuvo marcada por un potente ensamble de músicos internacionales. Se unió Blixa Bargeld en guitarras, Barry Adamson en el bajo y Hugo Race en las guitarras. El disco debut sería From Her to Eternity (1984). La conformación de este grupo sería el proceso más fructífero en la carrera de Cave, y el sonido innovador que dieron a conocer al mundo, junto con las letras producidas totalmente por el líder, quien por su antecedente familiar despertaba una gran pasión por la escritura, generarían en los seguidores de su estilo (y en los no tanto) fuertes emociones.
Cuesta definir en poco espacio a un artista que durante toda su vida ha vivido entre las tinieblas, pero que a pesar de haber llenado su alma de grietas, el artista evolucionó para darle otro sentido a su carrera. Detrás de todo el éxito que significa su carrera musical, lo acompañaron los demonios de su adicción al alcohol y la heroína, una dolorosa ruptura familiar y la pérdida de su hijo Arthur. Pero Nick Cave es un luchador que hasta el día de hoy, a sus 64 años, ha sabido ganar a sus demonios internos.
A continuación, conoceremos 10 canciones imprescindibles del músico australiano Nick Cave.
Red Right Hand
Del álbum Let Love In, 1994. Cave nos encamina hasta la figura de un ser divino. La secuencia entre los instrumentos nos devuelve al rock and roll clásico de los 50’, aunque mucho más lento. Si se revisan archivos, esta es una de las canciones que a Nick le gusta corear con el público.
Into My Arms
Formando parte de The Boatman’s Call, 1997. Un álbum y una canción que le hacen sentido a la frase “menos es más”. Sólo la voz de Nick, sumada al cohesionado sonido del piano, dan vida a esta canción que retrata un corazón destrozado.
Do you love me?
Del disco Let Love In, 1994. Una canción que nos involucra a todos en algún momento de nuestras vidas. El trayecto del amor al desamor. El piano y la delicada faceta jazzística le da un glamour a la letra compuesta por Nick Cave.
Stagger Lee
Incluída en Murder Ballads, 1996. Cave siempre fue un especialista en narrar historias truculentas. Esta vez, el cantante australiano logra calzar perfectamente un sonido envolvente de guitarra y bajo, mientras se cuenta la brutal historia de cómo un hombre entra a un bar e inicia una matanza.
Henry Lee
También de Murder Ballads, 1996. Una canción recordada por la particularidad de compartir la voz protagónica junto a P.J Harvey, con quien tuvo un intenso y breve romance. Ambas voces logran llevar al clímax una historia que culmina en un asesinato.
Nick the Stripper
La punta del iceberg, Esta canción de The Birthday Party sólo era un adelanto de lo que estos jóvenes serían capaz de crear. Sería una de las canciones más escuchadas e la era post-punk de los 80’.
https://www.youtube.com/watch?v=l5I2vEcVC_I
Shivers
Door Door, 1979. La canción con la que The Boys Next Door se defendió en sus inicios, y que daba cuenta del potencial del grupo australiano. Obra de Rowland S. Howard, es una de las canciones más valoradas en el país, en lo que fue el inicio musical de los adolescentes.
https://www.youtube.com/watch?v=QsIPoRTBV44
Straight to You
Perteneciente a Henry´s dream, 1992. Uno de los lanzamientos más exitosos en el ámbito comercial. Se desliga más del dramatismo que tienen otros títulos, En los 90´ sería considerada como una de las baladas más épicas, recargada instrumentalmente.
https://www.youtube.com/watch?v=CYbOHXMtelU
The Ship Song
Canción que forma parte del disco The Good Son, 1990. Es el romanticismo hecho canción. Una prosa delicada y optimista frente a lo que significa la llegada de un nuevo amor, sin peros ni dobleces. Se puede apreciar la capacidad embellecedora de la escritura de Nick.
The Mercy Seat
Canción de Tender Prey, 1988. Trata de los últimos minutos de un condenado a muerte. El protagonismo es de todo el grupo, las guitarras de Bargeld y Harvey despegan mientras Wydler es una aplanadora con la percusión.