«Parece que no ha pasado el tiempo, pero a la vez ha pasado mucho». Esta frase dicha por Emma Watson (Hermione) en «Harry Potter 20th Anniversary: Return to Hogwarts», el especial de HBO Max estrenado este sábado 01 de enero para celebrar los 20 años del inicio de la saga cinematográfica, resume en cierto modo el sentir del elenco que dio vida a los personajes creados por J.K. Rowling: un reencuentro entre viejos amigos que han pasado mucho juntos.
Es poresto que no es de extrañar que el especial haya servido para vivir momentos emocionantes entre sus protagonistas y para revelar algunos de los secretos que han estado guardados bajo llave y que, en ocasiones, han sido objeto de teorías y elucubraciones. Desde hipotéticos romances hasta curiosidades del rodaje pasando por momentos de duda en los que algunos pensaron en abandonar.
Recopilados por AS.com, estos son los más destacados:
1. El director Chris Columbus se mostró escéptico al principio sobre la lectura de los libros de Harry Potter. Se hizo cargo de las dos primeras películas de Harry Potter, pero fue su hija Eleanor quien le ‘obligó’ a leerlos.
2. Las velas flotantes en el Gran Salón de Hogwarts eran reales. Mientras que las películas de Harry Potter usaban muchas imágenes generadas por ordenador para recrear la magia en la gran pantalla, las velas fueron la excepción.
3. Alan Rickman supo de la historia de Snape antes que nadie. De hecho, fue uno de los motivos de su participación en la saga porque al principio no estaba muy convencido. J.K. Rowling cenó con él para que cambiara de opinión ya que Rickman no quería ser encasillado como un villano.
4. Emma Watson estaba «enamorada» de Tom Felton durante el rodaje. Eso sí, la diferencia de edad de tres años hizo que Felton la viera más como una hermana pequeña. «Fui muy protector con ella», dijo. «Siempre he tenido una debilidad por ella y eso continúa hasta el día de hoy». Watson asegura que nunca ha pasado nada romántico entre ellos, pero todavía «se aman».
5. Daniel Radcliffe también estaba enamorado, pero de Helena Bonham Carter. Radcliffe le escribió una nota a la actriz que decía: «Te amo y desearía haber nacido 10 años antes. Podría haber tenido una oportunidad».
6. Los padres de Daniel Radcliffe no lo tenían nada claro. Columbus vio a Radcliffe en la adaptación de la BBC de David Copperfield y decidió que él debía ser Potter, pero dado que el rodaje originalmente se suponía que sería en Los Ángeles, los padres eran reticentes sobre su marcha.
7. Emma Watson casi abandona la franquicia. Y Rupert Grint. Ambos no estaban muy convencidos de regresar tras la primera película porque no supieron lidiar muy bien con las implicaciones de la fama. “Creo que tenía miedo, la fama nos golpeo a lo grande”, asegura Watson en el especial.
8. Jason Isaacs iba a ser Gilderoy Lockhart. Conocido por interpretar a Lucius Malfoy, era el candidato al papel de Gilderoy Lockhart. De hecho, no quería interpretar a Lucius en absoluto. «Estaba a punto de interpretar al Capitán Garfio en Peter Pan y pensé: ‘Bueno, no quiero interpretar a dos villanos de niños'», admite.
9. Daniel Radcliffe estaba impresionado por Gary Oldman. Radcliffe admiraba al célebre actor y de hecho, como ha reconocido en alguna ocasión, disfrutó especialmente las escenas en las que aparecía Oldman.
10. El director Mike Newell se rompió una costilla mientras filmaba El cáliz de fuego. Mientras organizaba una escena entre Oliver y James Phelps, quienes interpretaban a George y Fred en las películas, Newell se lastimó cuando les explicaba a los hermanos cómo luchar entre ellos.
11. Emma Watson y Rupert Grint estaban muy nerviosos por la escena del beso. Había mucha expectación e incluso burlas. «Todos querían estar en el set. Besar a Rupert es una de las cosas más difíciles que he tenido que hacer porque Dan, Rupert y yo somos hermanos».
12. A los miembros del elenco les costó despedirse de sus personajes. Cuando la franquicia de Harry Potter llegó a su fin, el elenco admitió que fue un sentimiento extraño separarse de los personajes ya que habían crecido mucho con ellos a lo largo de los años. «Siento que perdí la noción de quién era yo y quién era el personaje. Realmente no sabía dónde terminaba o comenzaba», asegura Grint.