Los herederos de David Bowie vendieron los derechos de publicación global del sólido catálogo del difuntomúsico a Warner Chappell Music; en un acuerdo que se estima en más de 250 millones de dólares.
El acuerdo comprende canciones de los 26 álbumes de estudio de Bowie; desde su debut homónimo de 1967 hasta su álbum «Blackstar» de 2016, lanzado dos días antes de su muerte. También incluye el álbum de estudio póstumo «Toy», que sale este viernes 10 de enero; los dos álbumes de estudio lanzados por la banda de hard rock de Bowie, Tin Machine; y varios sencillos de bandas sonoras y otros proyectos.
Warner Chappell, una subsidiaria de Warner Music Group, no reveló los detalles del acuerdo; pero las fuentes dijeron a Variety que los derechos de publicación de Bowie alcanzaron «más de 250 millones de dólares». El año pasado, Warner Music aseguró los derechos de licencia mundial del catálogo de música grabada de Bowie desde 1968 hasta 2016, un acuerdo que entrará en vigencia en 2023. La compañía ahora es propietaria del trabajo de Bowie como compositor y artista.
Financial Times informó en octubre que el catálogo de Bowie encendió una guerra de ofertas, ya que varias empresas han comprado los catálogos editoriales de artistas heredados en los últimos años. El mes pasado, ZZ Top vendió sus «intereses musicales completos» a BMG y KKR por un estimado de 50 millones de dólares. Hace casi exactamente un año, Hipgnosis Songs Fund compró la mitad del catálogo de Neil Young por 150 millones de dólares.
Otras ventas editoriales recientes incluyen Motley Crue (150 millones de dólares), Stevie Nicks (100 millones de dólares), Bob Dylan (estimado entre 300 y 400 millones de dólares) y Bruce Springsteen, quien vendió sus masters y catálogo editorial por la asombrosa cantidad de 500 millones el mes pasado.
David Bowie desarrolló una reputación como uno de los mejores cambiaformas del rock durante su carrera de aproximadamente cinco décadas. Su catálogo incluye éxitos canónicos como «Space Oddity», «Changes», «Rebel Rebel», «Ziggy Stardust», «Fame», «Golden Years», «Let’s Dance», «Modern Love» y muchos más. La venta editorial es otro triunfo para Warner Chappell, que también ha adquirido los catálogos de Bruno Mars, Cardi B, Quincy Jones y la herencia de George Michael, entre otros.