En esta temporada de vacaciones, Angelmó es uno de los destinos turísticos favoritos de los veraneantes. Pero también este lugar fue mencionado en Twitter por una polémica, los altos valores en uno de sus restaurantes.
Una usuaria de la red social compartió la cuenta de un restaurante cuyo total alcanzó los $162 mil, contando el 10% de la propina según lo que publicó ADN.cl.
“Esto es un robo”, reclama la citada fuente, que indica ser oriunda de Puerto Montt. “No vayan a comer a Angelmó. Aparte de sucio el lugar, no entregan carta y después te asaltan con la cuenta“.
Al observar el detalle y dada la cantidad de platos y bebestibles, se percibe que se trata de un almuerzo para ocho personas. El precio de la paila marina es de $18 mil y en la cuenta aparecen cuatro, lo que da un total de $72 mil.
También impresiona el valor del chupe, que asciende a $18 mil. Y sorprende además el precio de los jugos: cada uno cuesta $4 mil.
Rápidamente la imagen se viralizó en Twitter, en la que surgieron decenas de comentarios de decepción debido a este cobro. Aunque también hubo críticas por parte de algunos usuarios respecto a las razones de las diferencias entre las grandes cadenas y los pequeños negocios.
También hubo otros que valoraron los precios de otros locales, al parecer más razonables que el que se viralizó. Y por supuesto, no faltaron los cuestionamientos contra la usuaria que publicó la cuenta, considerando la temporada estival y el no haber preguntado por anticipación los precios de los platos.
¿Es realmente caro comer en un restaurante en Angelmó?
Rápidamente la imagen se viralizó en Twitter, en la que surgieron decenas de comentarios de decepción debido a este cobro. Aunque también hubo críticas por parte de algunos usuarios respecto a las razones de las diferencias entre las grandes cadenas y los pequeños negocios.
También hubo otros que valoraron los precios de otros locales, al parecer más razonables que el que se viralizó. Y por supuesto, no faltaron los cuestionamientos contra la usuaria que publicó la cuenta, considerando la temporada estival y el no haber preguntado por anticipación los precios de los platos.