Juan Cristóbal Guarello, periodista de ADN deportes, cuestionó el castigo impuesto por parte de FIFA al fútbol de Rusia. Este le impide al país de Vladimir Putin disputar el repechaje clasificatorio al Mundial de Qatar 202; y a los clubes rusos competir en los torneos del Viejo Continente por la guerra en Ucrania.
El Premio Nacional de Periodismo Deportivo aseguró; «hay hipocresía de la FIFA y del mundo del deporte en general en Occidente; pero cuando Estados Unidos, con España e Inglaterra, destruyeron Irak sin ningún argumento, inventando que existían armas de destrucción masiva y contraviniendo a la ONU, no vi a nadie sancionado en ningún deporte y ninguna disciplina”.
«Debieron ser sancionados por la Guerra de Irak en 2003»
Asimismo, Guarello apuntó: “Puedo entender que la UEFA, estando en zona de guerra, castigue al Spartak de Moscú, pero tampoco es culpa de ellos. ¿Cuántos jugadores comparten la invasión, qué poder de decisión tienen? Tendrían que haber suspendido a los estadounidenses e ingleses de los Juegos Olímpicos de Atenas 2004.
«Esa invasión insensata y criminal involucró la vida de 500 mil iraquíes y parece que no importa porque es un país que no tiene peso en el deporte internacional”, sostuvo el «Tenor de ADN Deportes» en lo que se refiere a lo zanjado por FIFA.
“La invasión de Estados Unidos, Inglaterra y España fue tan arbitraria y criminal como la de Putin, y peor en resultados. Agarró a cañonazos hasta los hoteles de corresponsales en Bagdad. Con este mismo criterio en 2004, Estados Unidos quedaba fuera de todo y con justa razón”, agregó el comentarista deportivo; planteando un análisis respecto a cómo debió ser castigado el país norteamericano y otras potencias por la guerra de Irak el 2003.
«El Mundial fue coimeado, la fecha hubo que moverla, el país es una monarquía encubierta, han muerto miles de inmigrantes durante las obras. Bajo ese mismo parámetro, no deberían hacer el Mundial ni estar en la FIFA. Hay cosas que tienen más repercusión mediática que otras. Como ha pasado en la historia, hay muertos que valen más y otros que valen menos”, concluyó.