Hoy en Palabra Que Es Noticia conversamos con Tomás Villarroel, académico de la Facultad de Artes Liberales de la Universidad Adolfo Ibáñez.
Los ataques rusos no paran en Ucrania. Este fin de semana se debió dar evacuación a las ciudades de Mariupol y Volnovaja, mediante “corredores humanitarios”, acción que tuvo que ser pospuesta debido a ataques. Según el presidente Zelensky, el próximo ataque iría a Odesa, ciudad portuaria, que está a las orillas del mar negro. Con esto podría generar un caos mayor a nivel económico y humanitario para Ucrania.
Panorama deslador
“El panorama sigue siendo desolador. No se ve solución en estas negociaciones. Da la impresión que no van a llegar a puerto. Aquello que apareció como un momento esperanzador, da la impresión que no va a tener un resultado, no va a haber un cese o alto al fuego, ni siquiera temporal”, señala Tomás Villarroel.
Retórica de Putin
“Llama la atención la retórica de Putin. Desde afuera uno ya no sabe cómo interpretarla. Un día el culpable es Zelensky, otro día las potencias occidentales, entonces la retórica de Moscú es absolutamente volátil, cambiante. Se dice que las sanciones económicas van a ser interpretada como un ataque sobre Rusia. Entonces la caja de herramientas rusa es variopinta y llega a ser ridícula”, indica el académico.
“Lo que vemos es un empecinamiento férreo de Rusia, luego del sorpresivo desenlace que tuvo cuando quiso ocupar Kiev y al querer derrocar a Zelesnky. Eso es un fracaso y es un empecinamiento a través de poder de fuego, bombardear posiciones militares, ciudades, población civil, escuelas, hospitales. Tenemos los precedentes de bombardeos similares que realizo Rusia con ocasión de las guerras en Chechenia y en Siria”, añade.
Maniobra distractora
“Mi impresión es que esto no tiene visos de finalizar. Las negociaciones de Ucrania y Rusia, quizá Ucrania tendría mayor interés de que se llegue a un acuerdo, siempre que ellos puedan preservar su integridad como Estado, su independencia, si es que pueden conservar su territorio o la mitad de su territorio. Entonces esta es una maniobra distractora que está realizando Rusia. Es un recurso más de Rusia”, plantea.
Reconstrucción imperial de Rusia
“Esto parece un plan de reconstrucción imperial. Cada vez quedan menos dudas de este plan de Putin de reconstituir a esa gran Rusia desde una concepción imperial. Esto no es nuevo, hay antecedentes en la historia de Rusia. No suscribiría a la hipótesis de que Putin está loco. Acá hay un plan que se ejecuta deliberadamente y con alevosía. Antes teníamos a un Putin como un gran oportunista, toma las oportunidades sin escrúpulos y hoy es un monstruo. Rusia no se ha atenido a las normas de derecho internacional y tampoco a las normas en situación de guerra. Acá todo se condice con un régimen criminal, todo apunta en esa dirección. La Haya ya ha tomado cartas en el asunto para avanzar en esa dirección”, concluye Tomás Villarroel.