El pasado viernes, Gabriel Boric asumió como Presidente de la República de Chile; y, entre una de las autoridades internacionales invitadas al cambio de mando se encontraba el mandatario de Argentina, Alberto Fernández; quien le dio un particular regalo al nuevo jefe de Estado.
A través de su cuenta personal de Instagram, el Alberto Fernández reveló que le regaló un vinilo del músico argentino Luis Alberto Spinetta, quien es popularmente conocido como “el flaco”.
Se trata del disco “Artaud”, de la banda Pescado Rabioso que era liderada por Spinetta, que data del año 1975 y que era de la colección personal de Fernández.
“Supe que con Gabriel Boric, Presidente de Chile, compartimos el fanatismo por el Flaco Spinetta. Por eso, le hice un regalo muy especial”; escribió Alberto Fernández en su cuenta de Twitter.
Supe que con @gabrielboric, presidente de 🇨🇱, compartimos el fanatismo por el Flaco Spinetta. Por eso, le hice un regalo muy especial 👉 https://t.co/h6l1BHmoO3
También le escribí una carta con frases de Spinetta que dicen mucho sobre su presente y nos iluminan en este tiempo. pic.twitter.com/vyWnlpnofj
— Alberto Fernández (@alferdez) March 12, 2022
Junto al regalo musical, el Presidente de Argentina también le obsequió una carta que le escribió al mandatario de Chile con frases de Spinetta que, según palabras del mandatario trasandino, “dicen mucho sobre su presente y nos iluminan en estos tiempos. Hay presente y futuro en América Latina“, publicó en Twitter.
Boric participó de Solemne Oración Ecuménica en la Catedral de Santiago
El Presidente de la República, Gabriel Boric, participó este sábado en la Catedral de Santiago de Solemne Oración Ecuménica por el pueblo de Chile.
A la actividad también asistieron autoridades de los tres poderes del Estado y de la Convención Constitucional, y representantes de distintas denominaciones religiosas.
Allí el arzobispo de Santiago, cardenal Celestino Aós, insistió en su homilía en que todos “somos de Dios y no pertenencia del Estado”, y que al ir en ayuda de los más necesitados el gran objetivo, más que la entrega de dinero, es “permitir una vida digna a través del trabajo”. Del mismo modo, enfatizó la corresponsabilidad de todos los chilenos al “iniciar y generar nuevos procesos y transformaciones”.
Se trató de una “Oración por Chile y el nuevo Gobierno”, una tradicional ceremonia ecuménica en la que el recogimiento también dio paso a la alegría y la esperanza en el futuro del país.