En conversación con el programa Palabras Sacan Palabras, el especialista de seguridad pública, Patricio Tudela conversó sobre la realidad nacional que existe en las cárceles del país y también se refirió a lo que pasa dentro de las penitenciarias con el Cartel Tren de Aragua.
Me gustaría conocer más de las nuevas maneras para cometer delitos desde la cárcel…
Bastante amplio pero vamos por parte, hay dos aspecto que no tiene resultados. Uno es que los recintos penitenciarios tienen que alcanzar la meta de reinserción social, entonces qué sucede, se vuelven zonas de operación. Nosotros estamos acostumbrados a mirar la delincuencia como en espacios públicos, pero aquí estamos en una problemática crónica que tiene que ver con que el crimen organizado se ha actualizado y cubre espacios con nuevos modus operandis.
Esta búsqueda de vínculos o redes de protección tiene que ver con mantener el negocio, aún cuando estas bandas están cumpliendo condena. Nosotros estamos acostumbrados a encontrarnos actividad delictual en espacio de vigilancia policial pero qué pasa cuando ocurre dentro de las cárceles. Acá hay un hecho que a mi me gustaría destacar. Hay que pasar del asombro hacia algo que en nuestro país es de los elementos más débiles, que es que nosotros tenemos muy poca información sobre qué sirve para que se controle el crimen organizado. Creo que es injusto comparar nuestro sistema carcelario con los países desarrollados, porque en nuestro país los estándares son bastante bajos.
¿Cómo ha impactado el tren de Aragua? ¿Quiénes operan desde las cárceles?
Para entender cómo evoluciona y cómo muta la actividad criminal, tenemos que asociarlo con una actividad económica. Todo grupo o banda criminal siempre van a estar buscando aliados que cumplan la función de proveedores, protección y cooptación, y de esta manera es muy complicado resolver el caso sin entender el problema de fondo. Esto es que nosotros tenemos una debilidad institucional grave y a todo esto, tenemos un contexto que hace muy propicio estas alianzas delictivas. En definitiva toda estructura criminal busca reclutar, y profesionalizar su rubro de trabajo.
Lo que importa es que efectivamente tiene que funcionar el negocio, pese a que queden presos, las cárceles son sitios donde cada vez más se puede trabajar…
Antiguamente cuando un delincuente prolífico cometió varios delitos se refugiaban en la cárcel, porque cuando entran las policías tienen una enorme dificultad para enterarse. Una de las grandes dificultades es que el sistema carcelario a veces funciona como sistema de protección o refugio.
¿Cómo evalúa este plan que plantea el Ministerio de Justicia?
Si ponemos en contexto este anuncio, aquí vamos a experimentar permanentemente revictimización, los anuncios planteados apuntan a mejorar la eficacia de la tecnología. Ahora, estas prácticas ya se intentaron aplicar en la década del 2000. Aquí se evalúa muy poco los anuncios o los impactos que tienen los gobiernos de turno. Gendarmería es parte del sistema de seguridad pública.
Crimen organizado que tienen prácticas desde el exterior ¿cuáles son las nuevas modalidades y de qué manera gendarmería hace una distinción?
A nivel internacional o nacional siempre van a buscar reclutar soldados o proveedores sin embargo, hay una frase muy importante, la capacidad del sistema carcelario de perfilar a las personas reclusas. Si ponemos a una persona joven que lo van a reclutar con prestigio y protección se va a producir un efecto contagio. Hay un tema clave, la capacitación del sistema carcelario y los profesionales que deben hacer seguimiento para la reinserción no es suficiente y no se trata sólo de aumentar el contingente humano.