Hoy en Palabra Que Es Noticia comentamos el show de Guns N’ Roses en Chile con Rainiero Guerrero, director de Radio Futuro.
La banda se presentó por sexta vez en Santiago anoche ante 60 mil personas en un agotado Estadio Nacional. Un set de 3 horas y 27 canciones repasando lo mejor de su repertorio. Y un show que junto al conductor de Rock Shop comentamos a la salida junto a los auditores de la 88.9.
«Fue muy interesante hacer ese ejercicio de conectar con la gente y preguntarles qué les pareció el concierto. Y la unanimidad dice que fue un gran concierto. En este caso, hay que coincidir. Las expectativas eran altas y siempre el punto de duda era Axl Rose. Había registros que no lo mostraban en la mejor forma, y a mí me parece que con 3 horas y tres minutos de show, queda claro que es una de las bandas más grandes del rock. Una cruza entre los Rolling Sones y Aerosmith», parte comentando Rainiero Guerrero.
«Me parece que están haciendo una entrega y una revisión bastante en buen estado de todo su repertorio. Una banda que tiene tremendos himnos en el repertorio de rock. Vimos a una banda afiatada, un sonido demoledor. Un Slash que se echa al hombro porque, quizás si la extensión de las tres horas no está dada por las canciones. Paul McCartney toca más de 28 canciones en su show, pero este no dura 3 horas», agrega repsecto al show de Guns N’ Roses
«Ahí hablamos de momentos de extensión. Solos extensos, momentos en los que Axl se guarda y se cambia de ropa. Son momentos de descanso para un tipo que ya no tiene la voz de hace 30 años, ya no es el mismo tipo. Pero así y todo, él hace ese esfuerzo de tratar de ser ese mismo, de buena forma y calidad, muy digna. Vimos una recuperación y una forma muy presentable de hacer un show», plantea el director de Futuro.
«Lo que vimos anoche en el Estadio Nacional fue un show plagado de éxitos. Una presentación sólida de cómo se construye un repertorio. Podría sacarse 3 o 4 canciones y queda un show perfecto. Hay gente que es muy fanática de Guns N’ Roses, que conocen todo. Pero la gran masa conoce los grandes éxitos y van a ver eso. Y no son pocos. Quizás agregar al show otras canciones hace que el show se aletargue por momentos. Pero la irrupción de clásicos, en particular temas como ‘Welcome to the Jungle’. Fue un concierto de alta calidad, una banda que por algo sigue girando, recordando los laureles pero sobre una gran base musical. Un nombre tan grande como Guns N’ Roses lo debe cuidar. Lo que vimos va por ese camino. Cuidar ese legado, mostrarlo bien y conectar con nuevas generaciones», asegura Rainiero Guerrero.
«La calidad vocal de Axl podríamos decir que está en tela de juicio. Es un tenor mucho más alto y exigió su garganta al máximo. Todo lo que ha hecho son exigencias críticas para su voz donde pasan los años. Y hoy aparece con 60 años pero no le podemos exigir lo mismo que hace 30 años. Son sobrevivientes. De alguna manera, exacerbaron la idea del sexo, drogas y rock and roll. Eran el extremo de lo que habían hecho los Rolling Stones», asevera el periodista y conductor de Rock Shop.
«Hay un azote grande al cuerpo, al físico de esta gente. Hay minutos donde se nota que no es la misma de antes. Él no va a modificar el tono de una canción porque la gente la conoce de una forma, y en ese sentido la banda es respetuosa con ese legado y la toca de esa manera, aunque la voz no suene así. La gran potencia de esta banda es la voz de Axl Rose. Es la punta de lanza con la que salía a conquistar el mundo», añade.
«Lo que vimos ayer fue una presentación súper digna y súper buena. La gente ayer estaba feliz de ver el espectáculo. En el total, la voz de Axl pasa a ser un tema secundario. Lo importante es el show completo, con un escenario enorme, una mole. Un show impecable, propio de una banda que sobrevivió 30 años después», concluye Rainiero Guerrero.