Carlos Tromben posee varias facetas, las más conocidas son las de periodista y escritor. Donde ha escrito una serie de obras premiadas como: El vino de Dios, Balmaceda o Karma. Sin embargo, hoy se planteó estar del otro lado de la industria y junto a su esposa María Paz Vargas, quien es doctora en literatura y que tuvo experiencia en la editorial Anagrama de Barcelona, fundaron la editorial RocaMar.
Pese a que el primer libro publicado por RocaMar es una novela del propio Tromben (Guía para armar un complot) la nueva editorial tiene por vocación la no ficción, siendo la edición de este libro una especie de ejercicio de ensayo y error, con lo que los dueños buscan ganar experiencia y no cometer errores con autores que no sean parte directa del proyecto.De esto y de la contingencia conversamos en Futuro con el economista, periodista y escritor Carlos Tromben.
¿Esto es una novela? Guia para armar un complot…
Tiene harto humor negro, sobre un barrio que se parece mucho al que estamos ahora. Nació de una experiencia personal, en una casa donde habían trillizos enanos. Eran dos mujeres y hombres. Así nació la historia y se llevó completamente a la ficción. Estábamos en un edificio y veíamos la casa de ellos cuando hacían asados…
¿Hiciste todo en base a la observación?
No quería que fuera periodismo, quería que fuera ficción. Como si estas personas fueran poderosas y ahí empezó todo. Me imagine que ellos eran enemigos del alcalde Labbe.
¿Cuánto tiempo tuviste guardada esta novela?
Se publicó el 2014 en una edición muy limitada y estuvo guardada como 7 años, cuando teníamos que echar a andar RocaMar, entre buscar alternativas dijimos ya vamos con la guía, es chistosa y está armada. Al releerla nos acordamos mucho.
Hablas de un viaje a Barcelona… Decidimos partir para allá por un tema de tu mujer… ¿Allá tuvieron el complot? ¿Y cuál es la idea de esta editorial?
La idea es ser un espacio de lectores que tengan propuestas de investigación y diálogo para dar pistas sobre la crisis que estamos viviendo. Hay muchos elementos y queremos aportar a eso y poder generar diálogos entre distintas especialistas. Queremos ser una editorial de no ficción.
¿Cómo ha sido estar del otro lado?
Es bien interesante, a través de la difusión del libro nos contacta gente, un abogado por ejemplo. En la interseccionalidad nos queremos ubicar. Somos 3, yo, mi esposa y nuestra socia Paula Guzmán.
Cuando hablas de esta crisis ¿Qué cosas te parecen iluminadoras?
Las historias que nos activan tienen una historia personal de una persona que investiga algo y dedica su vida a encontrar explicaciones. Pero también están las reflexiones de la disciplina misma, como los sistemas sociales humanos. Nos saludamos, nos decimos feliz cumpleaños y lo simbolizamos en una torta ¿Que significa la torta?
Escribes también de economía y hoy nos sorprendes con este libro…
Es ficción weird…
¿Cómo te ordenas para jugar con todos estos géneros?
Es un problema a veces… Son espacios, cuando termina un proyecto vienen un descanso, luego se que viene otro proyecto. En estas pausas me pongo a hacer estos libros, en un mes y así. Como los actores, es normal dentro del oficio o como los músicos que tienen bandas masivas y también proyectos personales. En la literatura suele no serlo, un solo género y punto, pero yo he tratado de abrir varios flancos.
El humor y la ironía son parte de tu personalidad… ¿Qué otro elemento tiene que tener aquello que te interese?
Una mirada innovadora y que arroja un rayo de luz en toda esta incertidumbre que hay. Los temas que podemos jerarquizar, son del medio ambiente por ejemplo. Yo no sé para qué hacen las COP. ¿Por qué no pasa nada? Las personas tienen que tener esa mirada, frescas, una capacidad para descomplejizar lo complejo y hacerlo simple para el ciudadano.
En la economía y la política ¿Qué es lo que estás viendo con Boric? Y con la majamama…
Esta generación política nueva llegó con mucho brillo, vienen del 2011 con los estudiantes. Ahora están del otro lado y están descubriendo el estado tal cual es, el estado profundo. No es la banda presidencial ni las buenas intenciones, en el estado hay interés y de fuera no se ven. El estado profundo se ve quien realmente manda, a veces el Presidente toma decisiones que desconciertan a quienes votaron por él. No más AFP por ejemplo pero abran compañías de seguros.El gobierno tiene que sacar leyes y las tienen que sacar en una negociación y ahora necesitan a esas personas con las que tuvieron problemas para poder sacar estas leyes. Hay que ver cómo se organizan esas vueltas de carnero y es super complejo. Los acuerdos multilaterales de comercio están rotos, no abran más.