Podría decirse que ningún álbum lanzado durante la era de Brian Johnson llegó con menos fanfarria que «Blow Up Your Video» de AC/DC. El disco salió el 18 de enero de 1988.
Los dos álbumes de estudio anteriores de AC/DC, «Flick of the Switch» de 1983; y «Fly on the Wall» de 1985; habían palidecido en comparación con los mega-triunfos anteriores «For Those About to Rock«de 1981 y «Back in Black» de 1980, creativamente hablando. De hecho, si no fuera por el truco de la banda sonora; y los grandes éxitos de «Who Made Who» para elevar el perfil comercial de la banda; su carrera podría haber estado en peligro real.
Hubo muchos problemas que contribuyeron a la caída en desgracia de AC/DC. El alcoholismo creciente de Malcolm Young; la expulsión de Phil Rudd; incluso complacencia, claro, pero quizás el más obvio de estos abordados por «Blow Up Your Video» fue traer de vuelta a un productor real para trabajar con la banda en el estudio. ¿Y quién mejor para tranquilizar a los chicos y ponerlos en marcha que el equipo de Vanda & Young que había llevado a cabo sus primeros cinco álbumes?
Funcionó, en su mayor parte. Pero seamos honestos. Muchas de las canciones nuevas («Some Sin for Nuthin», «‘Ruff Stuff») resultaron ser casi tan vulgares e inminentemente olvidables como esos esfuerzos recientes. Aun así, un par de éxitos de buena fe en la frenética «Heatseeker» y la contagiosa «That’s the Way I Wanna Rock ‘n’ Roll» demostraron que AC/DC aún podía componer canciones sin perder los huevos por completo.
En pocas palabras, todas estas canciones, mediocres o geniales, al menos sonaban como el AC/DC de antaño. El veredicto final fue, por supuesto, dado por los fans. Se llevaron tantas copias de «Blow Up Your Video» como de sus dos predecesores combinados.
Quizás más que cualquier otro logro, sin embargo, «Blow Up Your Video» ayudó a los hermanos Young a comenzar a enderezar su nave. Preparando así el escenario para el rotundo regreso a la forma que fue el álbum «The Razor’s Edge» de 1990. Uno lleno de momentos destacados.