Día a día se conocen nuevos antecedentes e historias del trágico terremoto 7,8de magnitud que azotó a Turquía y Siria, el cual lleva más de 19 mil fallecidos y miles depersonas heridas y desaparecidas tras este catastrófico evento natural. De las labores de búsqueda, las ayudas y sobre la conmoción que siguegenerando las constantes réplicas del movimiento telúrico, en Palabras Sacan Palabras conversaremos con una profesora chilena radicada en Turquía hace siete años.
¿En qué ciudad estás?
«Vivo cerca de Estambul, en una provincia que está casi a dos horas de esta tremenda ciudad. La situación es desoladora. En 1993 hubo un terremoto con la misma similitud en cuanto a magnitud. Con lo ocurrido, nos afectó bastante y es muy complicado».
¿Cómo viviste el terremoto?
«Turquía es un país muy grande. De las 80 ciudades, solamente 10 fueron afectadas. La extensión del terremoto corresponde en superficie a lo que es Australia».
«Como tenemos seis horas de diferencias, me desperté para ir al trabajo y recibí muchos mensajes de familiares chilenos. Abrí redes sociales y quedé el shock al enterarme de lo ocurrido. No había palabras. A las horas después nos dijeron que no podíamos ir por una semana y el Ministerio de Educación dio una segunda semana más de duelo».
«La magnitud del terremoto es incomparable e inexplicable. Hubo ciudades que desaparecieron en su totalidad. No hay nada. Todo se cayó. Hay muy bajas temperaturas y eso es un problema. Los turcos son sumamente agradables y de buen corazón. Te bridan siempre una mano y la situación actual los tiene literalmente en el suelo».
Hay muchas dificultades para llegar a las zonas afectadas, ¿Cuál es la realidad que se vive?
«Ya se está llegando a los 20 mil fallecidos. Hablaba con mi novio que está en la zona cero. Tenemos un problema que es llegar al lugar. Las carreteras están cortadas y hay que buscar rutas alternativas. Son muchas horas de viajes y las ayudan están siendo priorizadas por las zonas rojas. Sin embargo, la ayuda no llega a muchos lugares. Para entender mejor, cada ciudad corresponde a lo que es Santiago».
«Imaginemos que Chile, solamente es Estambul. 1/3 de la población de ha visto afectada. Es tremendo».
¿Qué pasa con las construcciones? ¿Cuál es la norma?
«Son preguntas que los mismos turcos se lo están preguntando. Hay construcciones que fueron vendidas y que se presentan con la etiqueta antisísmica y muchos se cayeron. Todo está en el suelo. Viviendas viejas y nuevas».
«La gente se pregunta el por qué del desplome de sus viviendas. Fue un terremoto muy superficial. Yo estuve en el terremoto de Chile en 2010 y lo que ocurrió acá en Turquía no es comparable bajo ninguna perspectiva».
¿Hay diferente cultura sísmica en los habitantes turcos?
«Aquí hay cero cultura sísmica. Yo trabajo en escuela y los mecanismos para actuar ante sismos, la gente no sabe. No existe cultura sísmica. Aquí fueron dos terremotos que golpearon el mismo lugar. Primero 7,8 de magnitud y la réplica fue de 7,6 de magnitud».
¿Qué relatos has obtenido por la experiencia de tu novio en zona cero?
«No es solamente él, sino mis amigos que están allá. El está traduciendo. Trabaja con equipos de habla hispana y está viviendo todo ese proceso que es muy fuerte. Es trágico hablar con tus amigos y les preguntes, no existiendo respuesta alguna. El área es tan grande que no llega la ayuda a todos. Es frustrante y chocante no tener los medios ni las palabras».
«Está todo cerrado e ingresa a la zona solo personal especializado».
Turquía es vecino de Siria, ¿Qué es lo que se sabe del territorio?
«Siria está afectado de gran manera. Hay una guerra civil hace bastantes años y las ayudas internacionales deben vivir un proceso tremendo. Las ciudades que son vecinas, es muy complejo tener una conexión. Están viendo opciones para que las ONG’S puedan ingresar al país pero no hay claridad».
¿Cuál ha sido la respuesta de la gente frente a Erdogan?
«Es bien delicado. No ha sido bueno, porque existe una crítica bastante grande al gobierno por parte de civiles. El desempeño no ha sido bueno».
«Las elecciones son en junio y antes de que ocurriera esto existía un Turquía dividido por bandos. Los cuestionamientos son generalizados por el accionar al gobierno. ¿Por qué el gobierno actuó 30 horas después? Hay una división en este país».
«Es un tema delicado porque como extranjeros no nos gusta tomar tanto tema. Hoy estaba con mis amigos turcos y ellos realizan una crítica bastante grande. Las primeras horas son cruciales y el gobierno no supo como reaccionar. Esa crítica y malestar lo hacen saber. Ayer censuraron TikTok y Twitter».
«Rondaron muchas fake news también dentro de la información que está disponible».
¿Qué tipo de ayuda se le pide a la ciudadanía en una tragedia de esta magnitud?
«Es gigante. Es como si 230 bombas atómicas hayan golpeado esos lugares. La reacción de la gente ha sido inmediata. Las personas comenzaron a organizarse y recolectar ropa, alimentos y otros enceres. Hay muchos que quieren ayudar pero otros estorban en la zona. Las universidades tienen sus comedores abiertos, los aeropuertos están funcionando a media máquina, pues se da una prioridad a las zonas afectadas».