Hoy en Palabra Que Es Noticia conversamos con el ufólogo Rodrigo Fuenzalida.
El ejército de los Estados Unidos derribó este fin de semana un ovni a gran altitud sobre el espacio aéreo de Alaska. El objeto volador no identificado tenía el tamaño de un auto, en comparación con el presunto globo espía chino, mucho más grande, al que las fuerzas estadounidenses dispararon el fin de semana anterior. Es la segunda vez que el ejército estadounidense elimina un ovni en seis días, después de que un F-22 acabara con el globo espía chino el sábado anterior.
En torno al accionar del ejército estadounidense por posibles ovnis, ¿Qué está pasando allá arriba?
“En primer lugar, es raro que puedas derribar un ovni. Todos los antecedentes muestran que ante acción de misiles, desaparecen estos objetivos no identificados. Un caso es lo ocurrido en Arequipa. Cerca de dos mil personas vieron este acontecimiento. Un globo en territorio peruano comenzó a realizar variación de velocidades. Los aviones lanzaron 65 pequeños misiles y no fue afectado el objeto”, señala Rodrigo Fuenzalida.
“Hay otro caso es Teherán, donde los sistemas quedaron paralizados. Entonces, es muy raro que ocurra este tipo de acontecimientos. Aún no se sabe qué son. Los norteamericanos se han desmarcado de los objetos destruidos”, indica el ufólogo.
“Hablan sobre elementos alargados los cuales fueron derribados. Lo importante, es que aquí hay un cambio cultural. Me llamó la atención que no se descartara que fuese un objeto extraterrestre. A mi parecer, creo que puede ser un tipo de drone. Sin embargo, hay un cambio de cultura. En ese sentido, este año se inicia el proyecto Galileo, que ha dicho textual que se hará cargo de los ovnis, cosa que la ciencia no se ha hecho responsable”, asevera Rodrigo Fuenzalida.
¿Cuánto se ha avanzado en torno a la investigación del fenómeno?
“Yo estuve en Estados Unidos el año pasado y en mayo viajo nuevamente a estudiar este tipo de situaciones. Hay mucha voluntad de dar a conocer data archivada. Lo que me han dicho textual, el coronel Alexander: hay bastante información pero no tenemos el contacto. Estados Unidos se pone nervioso. Hay un gran interés y un grupo importante vinculado al mundo militar, quiere obtener mayor información”, asegura el ufólogo.
Por su experiencia personal y en cuanto al estudio realizado en el tiempo, ¿Qué pasa con América Latina?
“Había prejuicios ante un fenómeno que ocurre. En América Latina llevamos la delantera en varias cosas. Aquí existen la mayor comisión de organizaciones que tratan el tema y fenómeno ovni. En Chile hay una dirección que está en el museo aeronáutico. Los casos que ocurren en nuestro continente se concentran principalmente en casos de aterrizaje, huellas, interferencias y creo que Chile es un laboratorio prominente. Estoy a cargo de un proyecto en La Patagonia. Ahí se colocarán cámaras de distintos tipos para captar la casuística en un sector de la Patagonia, donde hemos podidos ver estos avistamientos y registrar”, afirma Rodrigo Fuenzalida.
¿Hacia dónde va esto?
“Hay una línea de investigación que plantea que estos no sean extraterrestres, sino más bien formas de conciencias que están instalados en lugares donde no hemos podido llegar. Hay estudios mediante la ciencia, que establece que habían descubierto una especie de modificación cerebral. Se han dado cuenta, que estos encuentros dan la idea de impulsar nuestra evolución. Es posible estar en dimensiones distintas. Esto implica que uno pueda hacerse cargo de las historias que rondan en diversas comunidades”, plantea el ufólogo.
¿Qué harán en la Patagonia?
“Pondremos suficientes cámaras. Esto está inspirado en un estudio realizado en los años 80 en Noruega. Allá han logrado muchos resultados y han interactuado con patrones de luz y en pequeños rangos de comunicación. Con la data que hemos podido recopilar, se justicia el proceso”, concluye Rodrigo Fuenzalida.