Hoy en Palabra Que Es Noticia conversamos con el psicólogo educacional, académico UMCE y experto en convivencia escolar y temas de violencia en la escuela, Manuel Cuevas.
Según la Superintendencia de Educación, el retorno a clases muestra un aumento de violencia en comunidades escolares y en zonas próximas a recintos educacionales. En este corto período se han registrado balaceras en sectores aledaños a establecimientos, detectado a estudiantes portando armas y en un liceo en Antofagasta se recibieron amenazas a través de redes sociales, que se realizaría un tiroteo en el recinto, además del funeral narco en Valparaíso, que obligó a la suspensión de clases en 14 establecimientos educacionales de la zona. Las causas de tal violencia se atribuyen a diversos factores: la pandemia y el confinamiento, el impacto por la expansión del narcotráfico, la crisis económica, la pobreza, las carencias familiares, etc, lo cierto es que la violencia se instaló en la escuela y lo urgente es generar canales para contenerla y contribuir a bajar los números, antes que siga creciendo.
¿Cómo observas esta violencia en las comunidades escolares?
“La respuesta a la violencia parte por conversar. Todos tenemos preconcepciones, ideas y contextos sobre las causas de la violencia. A veces, caemos en la idea fácil de buscar solo una causa. En ese sentido, le echamos la culpa a la pandemia pero es algo que viene en aumento en los últimos 10 y 15 años”, señala Manuel Cuevas.
“La idea es dar forma a una idea y causas. En 2014 el Banco Mundial hizo un estudio sobre Latinoamérica, donde señaló que la desigualdad explica mejor la violencia. Ese horizonte de aspiraciones y los medios no alcanzan. Frente a eso, se ocupan medios alternativos a la oficialidad”, indica el académico UMCE.
“En el contexto de escuelas, hay que pensar el problema de fondo en dos variables. Una está en la crisis de seguridad respecto a las acciones de balaceras y hechos de violencia en colegios. Es algo que hay que frenar ahora. En ese sentido, reconocer que hay un contexto que es violencia y la escuela tienen una dinámica que favorece el uso de la violencia. La educación no es una garantía de movilidad social. Hoy no hay garantía de que eso pueda ocurrir”, afirma Manuel Cuevas.
“La violencia busca encontrar un control y ejercicio del poder ante sus pares. El control del sin sentido, de la muerte y algo que no parece coherente entre otros”, asegura el académico UMCE.
¿Cómo se puede enfrentar esa violencia expresada en los recintos educacionales? ¿Cuáles son las herramientas?
“Hay que pensar la violencia relacionada con otros conceptos, tales como autoridad. Hay una dificultad para ejercer la autoridad, que se abre desde posturas autoritarias o hasta quien ponga atención quien quiera. La autoridad tiene una relación con el tiempo. Es una respuesta que debe dar una generación sobre el sentido y el sin sentido hacia dónde vamos”, plantea Manuel Cuevas.
“Se debe estrechar una alianza con la familia en términos de ciudadanía. Se apunta a valores ciudadanos, tanto en el transporte y otros espacios”, puntualiza el académico UMCE.
¿Cómo se dirigen los desplomes que ocurren en varias capas y territorios?
“Ahí viene una respuesta en torno a la eficacia. Si pensamos la violencia en clave de seguridad, pensamos en que debo cuidarme del otro. Lo otro es pensar, que se debe pasar de la seguridad a la convivencia con el otro. Entonces, para eso debe existir una posibilidad de poner nuevas sanciones. Eso implica tener nuevos protocolos”, sentencia Manuel Cuevas.
“Además de la intervención de los espacios, debe apuntarse a los otros actores de los espacios educacionales. Está el riesgo de echarle la culpa a todo. Debe existir una readecuación y articulación de profesores, estudiantes y directivos en el aula. Hay que darle valor y rescate a orientación, consejos de curso y asambleas. SI no se produce ese apoyo de vinculación, iremos hacia un aumento de la violencia en las escuelas”, fundamenta el académico UMCE.
Eso requiere profesores y adultos educados en esa línea, ¿es así?
“Totalmente. Muchos docentes dejan el desarrollo profesional y hay mucha deserción. Uno debe pensar de lo propio de la escuela que en sus formas de ejecución que no tienen sentidos para docentes ni estudiantes. Es interesante hablar de la impunidad en el espacio social. Se deben ejercer procesos de ciudadanía donde exista una toma de decisión en las escuelas y que termine generando una disminución del agobio laboral y violencia”, concluye Manuel Cuevas.