El Crédito Con Aval del Estado suma un nuevo capítulo. Una de las mayores promesas de campaña electoral del Presidente Gabriel Boric sigue sin tener un rumbo claro. Según cifras de la Comisión Ingresa, entidad administradora del sistema del CAE, se evidenció que las personas “al día” disminuyeron de un año a otro. Si en diciembre de 2021 era cercano al 52% al día del total de deudores egresados, a diciembre de 2022 disminuyó al 46%.
Sobre la realidad que viven las y los deudores en materia al CAE, se suman otras problemáticas en los espacios educacionales que guarda relación con la violencia y su expresión en la convivencia estudiantil. Para conocer más detalles en Palabras Sacan Palabras conversamos con el director ejecutivo de Acción Educar, Daniel Rodríguez.
¿Cómo se interpreta esta caída del pago en deudores del CAE?
«Nosotros hace más o menos un año, hicimos un análisis del mes de la elección presidencial. Ante la posibilidad de una condonación significó un aumento en la deuda. Esta tendencia se ha mantenido. Pueden existir variables relacionadas con la situación económica».
«A medida que aumenta la morosidad, aumenta la deuda y cada vez es más difícil pagar la totalidad. Lo que termina pasando es que la promesa es más difícil y lograble en el tiempo».
¿Cuántos deudores del CAE hay? ¿Se pueden clasificar?
«No quisiera hacer esas indicaciones. Son posibilidades. Lo que nosotros mostramos es que aumentó la cantidad de morosos. Eso se ha mantenido y no sabemos si son por razones económicas o políticas. No puede ser por una sola razón. De hecho, la pandemia generó un aumento de la morosidad».
«Existen deudores que terminaron sus carreras con éxito y hoy se benefician de lo que invirtieron en la carrera universitaria con mayor renta y acceso a mejores sueldos. Esas personas restituyen los recursos. Ahí hay un cumplimiento de la promesa del Estado, donde te prestan el monto y uno lo devuelve. El problema más grande es con quienes desertan. Al desertar mantienen la deuda».
«Este grupo de personas van acumulando un nivel de deuda que no tiene nada que ver con su capacidad de pago. Por tanto, ese grupo de personas se vuelve imposible de manejar y ahí hay un problema de condonación de deudas».
¿Cuánto es la deuda del CAE acumulada?
«Son cerca de 11 mil millones de dólares».
¿A qué equivale?
«No lo sé. Pero son varias veces la reforma tributaria rechazada hace poco. Es un monto muy significativo».
¿Están a favor de la condonación universal?
«No. Es una mala política pública esa. Hay personas que recibe dineros y pueden restituir. Por tanto, no se justifica que el Estado gaste dinero en quienes lo tienen».
¿Qué porcentaje tiene un trabajo permanente y bien remunerado?
«No tengo el número pero no es demasiado grande. Sin embargo, lo más importante en quienes no pueden manejar esa deuda. Ahí debe existir una política pública».
«Es deuda sigue creciendo».
¿Debe existir una política pública focalizada en quienes no pueden pagar?
«Me parece delicado, no porque haya tenido problema al estudiar una carrera es culpa del sistema. El objetivo es apuntar hacia una injusticia o mal diseño, como lo tuvo el primer CAE. Se convierte en una carga financiera imposible de pagar. En Comisión Ingresa se ha visto que se puede restituir».
«Si son incobrables, no tiene sentido seguir cobrando. En el caso de quienes puedan restituir, deben hacerlo».
¿Cómo vieron la polémica sobre el narcofuneral en Valparaíso?
«Las declaraciones del ministro de Educación fueron malas. No creo que esa sea su postura. No fue correcta y él lo rectificó. La posición de la Ministra Tohá prevaleció».
«No puede ser que se transmita la idea de que el Estado es incapaz de asegurar el derecho de la educación por llevar adelante un funeral narco. Esa no es la manera de enfrentar como lo que planteó el ministro Ávila».
«No se puede dar el mensaje de que la escuela debe adaptarse a los funerales narco, sino al revés».