En la tarde de este martes, el Tribunal Constitucional determinó rechazar los requerimientos presentado por un grupo de senadores de oposición que buscaban impugnar 7 de los 13 los indultos presentados por el Presidente Gabriel Boric, en diciembre pasado. Por su parte, distinta suerte corrió el proyecto de Ley de Autopréstamo que debía ser votado durante esta jornada en la Cámara Baja. Producto del cambio de las urgencias del gobierno y su posición en la tabla de discusión en la Cámara de Diputadas y Diputados, esta votación se postergó para la jornada de miércoles. Desde el oficialismo han llamado a rechazar esta iniciativa por la situación económica actual del país. Además se estima que cerca de un 33% de los afiliados podrían quedar sin fondos en caso de que se apruebe. Para conocer más detalles en Palabras Sacan Palabras conversamos con el diputado de Convergencia Social, Gonzalo Winter.
¿Es dulce el sabor del fallo del Tribunal Constitucional?
«No, era bien esperado por lo que soy exigente a los sabores dulces. El Tc no falla la pertinencia o si es bueno o malo para el país, sobre el accionar del presidente. Lo que resuelve es que lo hecho por el Presidente está bien realizada la labor por el Presidente Boric».
«A mi juicio, entendía que sería así cuando se pidieron todos los indultos desde 1980 a la fecha. Todos están justificados de la misma manera. Si decían que estaban mal fundados, se debía echar abajo todos los indultos previos. El que quiere contravenir puede hacerlo. Lo que deben hacer es dejar de decir que el Presidente violó la constitución».
¿Está cerrado este proceso?
«No, el flanco político no se cierra. Me imagino que la derecha seguirá hablando de esto y la conversación sigue abierta. Un militante de RN dijo que si el fallo iba en contra, lo llevarían a una acusación constitucional».
Queda un indulto pendiente… ¿Es pertinente avanzar en este momento con ese indulto?
«Hubo medios que contaron esta información de manera tendenciosa a mi juicio. Era como si el gobierno estuviese trabajando en un indulto. Eso es falso. Todo chileno que está condenado con una prueba privativa de libertad puede pedir un indulto. Cualquier puede solicitarlo».
«En el fondo, vi hace poco un agitador que anda de analista y puso que eran las prioridades del gobierno. Lo que pasó realmente es que hay un preso, tomó un papel y señaló que quiere ser indultado. Se está analizando. Sin embargo, aún no llega al escritorio del ministro de Justicia».
¿Se debe avanzar?
«Es un momento muy delicado para hacer un indulto, pero no es mi responsabilidad como diputado tomar una determinación así».
¿Fue un error del Gobierno?
«Yo estaría de acuerdo con parte del análisis contenido en la pregunta, en lo que ha ayudado a agitar las aguas. Finalmente el debate se está encausando en que fue una facultad presidencial. Los presidentes pagan en popularidad lo que va tomando y decidiendo».
¿Le costará esto al Presidente? ¿Leyó los antecedentes?
«Yo sabía que había una promesa de campaña. Los indultos jugaron un rol para cerrar el episodio del estallido social. Para bien o para mal, ya ocurrió y debía llegar a su fin».
¿Se ha cerrado o finalizó esta etapa?
«Hay diversas formas de entender el estallido social. La crisis en que habita Chile y la percepción es una injusticia en si mismo. Está vivo».
«Yo me refiero en otro sentido, que tiene ver con los viernes y determinados sectores».
¿Cómo ve el tema de autopréstamo?
«Después de la tributaria, el trabajo de predictor de votos se volvió de alto riesgo. Creo que se va a caer este proyecto. No necesita la mayoría simple de los presentes, sino que por requerir una modificación tiene que cumplir 89 votos. Es la mayoría de los diputados en ejercicio».
«Dicho lo anterior, también quiero decir que el ministro Marcel decía que era un autoengaño el autopréstamo. Una de las autoras, Pamela Jiles, le respondió que efectivamente era un retiro encubierto. O sea, cuando dicen que el ministro ha acusado que es un autoengaño, lo dice la misma autora del proyecto. No es un préstamo, sino un retiro».
«Me he formado la convicción y voté en contra en la comisión. Aún hay esquirlas de José Piñera. La misma derecha insistió que es propiedad privada, dejando de lado la seguridad social. Me parece escandaloso un aspecto técnico: hay mucha gente que no tiene fondos. Eso generará que suba el precio a la gente que retiró y a quienes no».
Hay bancadas divididas… ¿Qué ocurre con esa situación?
«Mi posición matemática es que quien tiene 10 mil pesos, van a valer nueve si es que existe este autopréstamo».
«Encuentro que cuando se dio el primer retiro, donde 3 millones de trabajadores informales, y el gobierno sale con un bono de $60 mil, había que entregar un aporte. Ahora, se rechazó una reforma tributaria donde los dueños y grandes empresarios iban a pagar mayores impuestos, se rechaza esa idea».
¿Qué pasa con la coalición que no puede alinearse?
«Tengo la impresión que los diputados del Partido Comunista se van a unir a nuestra postura. Donde yo tengo dudas es en la bancada del PPD. No entiendo sus posturas. Lo demás habría que preguntárselos a ellos».