El Caso Relojes Vip sigue dando que hablar. Hace unos días CIPER CHILE mediante un reportaje entregó antecedentes del rol de siete policías de la PDI -hasta ese entonces- que figuran en calidad de imputados por la entrega de información clave a empresarios y joyeros. El principal accionar de estos funcionarios apuntaba al cobro de millonarias cifras por la filtración de información del caso y el aviso con anticipación de allanamientos.
Los delitos imputados a los siete ex funcionarios de la PDI apuntan principalmente a las figuras delictivas de cohecho y violación de secreto. Un día después de conocerse el reportaje, la Policía de Investigaciones expulsó a los siete detectives involucrados en el caso, afirmando que como institución no amparan las conductas que se alejen de la doctrina y valores institucionales. En Palabras Sacan Palabras conversamos con el periodista de CIPER, Benjamín Miranda, para conocer más al respecto.
¿Qué pudieron investigar en esta arista?
«Con este reportaje lo que busca Ciper es centrarnos en la participación de policías a los flancos investigados por el caso de joyas. Posteriormente dio un giro más farandulero por la presencia de Parived».
«En este caso de filtración por efectos que son responsables del Estado, ahí quisimos poner el foco. Es muy grave porque no sabemos hasta qué punto pudo afectar la investigación. Aún no sabemos si es por cambio de dinero. Si hubo un ofrecimiento y traspaso de información que llevara a un cuidado de los imputados. Según la PDI esos exfuncionarios están apartados».
¿En qué otras situaciones estarían implicadas?
«El avisar que están siendo investigado es un tipo de ayuda. Domingo Jalil, el rey del oro, es avisado que está siendo investigado. Sobre temas de diligencias futuras se enfoca la información y ahí tiene un foco de ayuda».
«Hay una red que opera traspasando información secreta y sensible. La primera persona que le pasa información a Jalil es el subinspector Cristián Álvarez Casajuana, que es amigo del hijo de Domingo Jalil. El hijo del funcionario de narcóticos es quien le dice. Otros dos ex oficiales de la PDI son los que ofrecen intercambio de información por 30 millones de pesos inicialmente. Aún no se comprueban esas transacciones».
«Hay policías que no están formalizados como Joaquín Jara Jara, que está involucrado por entrega de información a Roque Vásquez. Por su parte, hay otros policías que traspasaban información de lavados de activos a otras bandas. En ese caso se descubrió que revisaban antecedentes restringidos. Cada policía deja una huella que revisa los antecedentes, lo cual debiese ser una hoja de ruta para saber quién accede a cierto tipo de información».
¿Se investiga a otros PDI de los que ya salieron de la institución?
«Desde Ciper no puedo adelantar nada sobre eso. Sin embargo, desde el Ministerio Público no tenemos conocimiento sobre que se está investigando en esa línea con nuevos policías».
¿Fueron solamente expulsados?
«Una vez que se descubre ese traspaso de información, la PDI toma en consideración la violación de secreto. Para simplificar, los policías fueron notificados y confiscados. Se les allanó su oficina de la PDI y su casa. La participación de los policías en el traspaso de información es algo que lleva tiempo».
¿Por qué no se sabe cuánto se pudo haber escondido? ¿Cuánto se dañó la causa?
«Es una pregunta que queda abierta, al igual si hubo traspaso de información en otra causa. No lo sabemos y eso es lo más grave expuesto en este reportaje».
Ustedes hace un tiempo hicieron una investigación interna en Carabineros, ¿Les parece que la PDI tiene un órgano de persecución interno?
«Creo que más allá de la opinión personal sobre este tema, es importante remarcar que la investigación de la PDI uno puede cuestionar si fue expedito o no».
«En el caso de la policía uniformada, por los casos revisados por Ciper, se ve un modus operandi de desplazar a los funcionarios involucrados a otras comisarias».
«Por su parte, hay que analizar la cantidad de información. Esta información se desarrolla a medida que se investiga el caso de las joyas. Debe existir evaluaciones internas desde la PDI para ver hacia donde se avanza».