Prácticamente 12 horas diarias de música ininterrumpida. 36 en total si sumamos las tres jornadas de Lollapalooza Chile 2023, desarrolladas en su segunda versión en el Parque Cerrillos.
Más de 100 bandas y solistas se tomaron este festival, que en su versión chilena para este año contó con un vuelco en su parrilla. La música urbana se tomó la «columna vertebral» del evento y fue abrazados por algunos y algunas, y criticado por otros y otras.
Con esa gran cantidad de artistas a disposición, los géneros musicales se cruzaron como es de costumbre en Lollapalooza, y desde nuestra vitrina nos pudimos empapar de diversas sonoridades.
Si hay algo que Lollapalooza instauró desde su origen en 1991, cuando Perry Farrell creó el concepto, fue generar nuevas oportunidades para agrupaciones de rock, indie, punk y más. Luego de un receso en su versión gringa que comenzó en 1997 y terminó en el 2003, el nuevo milenio y sus nuevas propuestas musicales hicieron lo suyo para modificar su sentido original.
La idea inicial de Farrell se transformó con su instalación en diversos países y llegó a Chile convocando géneros musicales similares a su franquicia original.
Los años pasan y lo urbano se tomó casi todo rincón. Plataformas de streaming, medios de comunicación y claramente, el interés de un público masivo.
Tanto así que artistas de la talla de Fito Páez señalaron que este movimiento «tiene una actitud similar al rock» y con eso me quiero quedar. En un festival con menos «platos» de la música que más nos gusta, queda hacer un análisis sobre una enseñanza que ha dejado Lollapalooza desde su creación en Chile. Y eso dejarlo como una interrogante más que una respuesta…
El rock es actitud… ¿o estilo de música?
Álex Anwandter, músico chileno de talla internacional y con un discurso disidente en todas sus veredas, principalmente en lo que a género respecta, realizó una broma a las Fuerzas Armadas en uno de los escenarios principales (que estuvieron presentes en Lollapalooza con exhibiciones y una orquesta) llamando a «aplaudirlos» de manera sarcástica.
Gerardo Elgueta, vocalista de la agrupación de rock de Temuco, Alectrofobia hizo un llamado al respeto por todos los géneros musicales casi al finalizar la presentación.
Está bien, hubo menos artistas representando los «sonidos estridentes y las guitarras afiladas» y nosotros vaya que disfrutamos cada riff pesado en esta oportunidad por parte de Ottto, Rise Against, Pettinellis, Alectrofobia, Samsara, Alain Johannes Trio y mucho otros.
Pero también queda la tarea de mirar hacia afuera y preguntarse…. ¿el rock es actitud o solo estilo de música? ¿Un artista urbano, pop (como el caso de Alex Anwandter y tantos otros) puedes ser rockero solo por su actitud o no por ejecutarlo? Son cuestionamientos para plantearse en que vereda está nuestro género dentro de las nuevas generaciones y de la industria musical, y el valor de Lollapalooza de mezclar «peras con manzanas» en materia de armonías para que la audiencia chilena conviva y disfrute de la diversidad. Finalmente si hay algo que tenemos claro, es que el rock une y no separa…