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Wilco: el Opus Magnus de su primera etapa con «Summerteeth»

El tercer disco del grupo, lanzado el 09 de marzo de 1999, los consolidó como incondicionales del indie rock.

Hector Muñoz |

Wilco 1999 Web

Wilco 1999 Web

«Summerteeth», lanzado el 09 de marzo de 1999; es el álbum más escurridizo de Wilco. Es el único construido principalmente sobre contradicciones. Algunos álbumes de Wilco son desgarradores y desgarradores. Como «Yankee Hotel Foxtrot» o «A Ghost is Born». Otros son melancólicos y maravillosos. Ahí está «Wilco (The Album)». Y otros son reservados y dignos. Como «Being There». «Summerteeth» es todo esto a la vez. Vertiginoso y despojado; gregario y violento.

Las letras de Jeff Tweedy son confusas, a propósito. Llenas de misterio pero sin llegar a sumergirse totalmente en él. Algunas canciones tratan sobre la soledad y el abuso. Y son inseparables de las del amor y la nostalgia. Gracias a la nueva influencia de Jay Bennett en la banda, la música es pop maximalista. A menudo dando pocos indicios de la agitación que adorna. Las palabras «verano» y «dientes» evocan una especie de calidez y malestar soleado que todos conocemos. Fusionados con cosas enterradas dentro de nosotros, instrumentos cortantes que crecen dentro de nuestras cabezas. El álbum es el sonido de un autor que intenta convertir las emociones humanas tontas en verdad a través de la música pop, el dominio de la emoción tonta si alguna vez hubo una.

La cabeza de Tweedy estaba llena cuando la banda comenzó a grabar «Summerteeth» en el último trimestre de 1997. Wilco estaba constantemente de gira y rara vez veía a su esposa y a su nuevo bebé. Su sello, Reprise, le dio a la banda su espacio, pero sin duda esperaban un disco que superaría en ventas a su predecesor. «Being There» fue un éxito modesto para los estándares independientes. Tenía 31 años, una edad en la que se supone que el arte refleja la experiencia, cuando el legado se define y no es tan moldeable. Es una edad en la que decides que estás satisfecho con tu voz o la llevas a un lugar nuevo con un propósito. Para Wilco, era hora de un gran avance.

Para 1998, Tweedy le había otorgado a Bennett, quien ingresó en 1994 como multiinstrumentista, una cantidad de control creativo sin precedentes. Se convirtió en algo así como un co-líder de la banda, especialmente en el estudio. Fue Bennett, de hecho, quien encabezó la participación de Wilco en el proyecto de «Mermaid Avenue» con Billy Bragg, y probablemente Bennett fue una de las fuerzas que empujaron a la banda lejos de sus raíces de country alternativo.

Tweedy había convertido a Bennett en colaborador de composición y arreglista: recibió crédito como compositor junto a Tweedy en todas menos dos de las 14 canciones de «Summerteeth». Fue su visión centrada en el estudio la que guió gran parte de las ambiciones sonoras del álbum. Pocas veces se escuchó un pop más sólido que «ELT» y «I’m Always in Love» en ningún álbum de Wilco, especialmente reforzado como esas canciones por guitarras puras y capas sobre capas de sonidos de sintetizador vintage.

Las sesiones iniciales de «Summerteeth» fueron interrumpidas por la grabación de «Mermaid Avenue». Cuando la banda regresó al estudio para trabajar en «Summerteeth», se había convertido en gran parte en un proyecto sobre lo que Tweedy y Bennett podían hacer dentro de los límites del estudio. Tweedy tomó las canciones que había escrito durante la primera sesión y las unió con material más nuevo, luego las construyó desde cero usando ProTools. “Esa fue la verdadera diversión de hacer el disco. Y fue importante, porque en las primeras etapas era increíblemente oscuro y pesado”, dijo Tweedy más tarde. “La música y la producción fueron un esfuerzo para que sonara esperanzador. Quería que fuera hermoso, no lúgubre”.

«A Shot in the Arm» uno de los puntos altos del álbum (y de la banda). La canción zumba y gira como un motor a reacción, apuntalando la letra de Tweedy, una pseudohistoria sobre el amor y el consumo de opiáceos. Las castañuelas entran aquí y allá, la electrónica balbucea, un solo sonido de cuerdas de sintetizador prefabricado zumba. Si la intención de Tweedy con «Summerteeth» era brindar honestidad emocional sin filtrar al más alto nivel del pop, esto es todo. Como muchas de las canciones del álbum, termina con un fragmento de un sueño oscuro repetido como un mantra pop: «Algo en mis venas / más sangriento que la sangre».

La producción de Bennett es menos adecuada para canciones más desnudas como «We’re Just Friends» e incluso «Via Chicago», donde las florituras de piano con reverb pueden incluso distraer un poco la entrega de Tweedy. Pero no hay duda de que Bennett agregó más peso y color a la composición de Tweedy. Basta comparar «Summerteeth» con, por ejemplo, «Wilco (The Album)», que salió 10 años después. Allí, las canciones de Tweedy son satisfactorias pero alegres, insinuando melancolía pero sin distraer con nada extraño. «Summerteeth» es un desierto emocional en comparación.

Otras composiciones de Tweedy, como «She’s a Jar» y «Via Chicago», emprenden una especie de surrealismo lírico, juntando momentos e imágenes en historias vagas. Es de suponer que «She’s a Jar» se trata de una mujer (la esposa de Tweedy, se ha dicho), pero tan a menudo como aborda la idea de la relación de Tweedy con una persona específica («She’s a jar with a heavy lid»), ofrece imágenes arrancadas de los sueños. , sin sentido directo, tal vez, pero resonante. «Solo sube a bordo de las vías del brazo de un tren / en mi frágil árbol genealógico», canta. Es una invitación a un lugar extraño, que abarca el frío metal y las extremidades de tierra, y describe cuán profundamente arraigada pero casualmente accesible puede ser la propia fragilidad.

Los impulsos surrealistas de Tweedy están más restringidos en «Via Chicago», pero solo un poco. Es una canción sobre soñar con matar a alguien que se disuelve progresivamente en un sueño. Cerca del final de la canción, canta: «Donde las tazas están rotas y enganchadas sobre el fregadero / me hacen pensar / las lágrimas de la escalera desmoronada no caen / brillan sobre tus hombros». No obtenemos significado, sino detalles melancólicos: lágrimas que en un segundo hacen que el mundo se derrumbe y luego no son más que un suave brillo en el hombro de alguien.

Ambas canciones, «She’s a Jar» y «Via Chicago», se estremecen con visiones de violencia. En este último, canta: «Soñé con matarte de nuevo anoche y me sentí bien». Estos destellos de violencia se encuentran entre los únicos momentos lúcidos del disco, una especie de ajuste de cuentas, tal vez, con todas sus fugaces sueños y visiones.

«Summerteeth» no vendió tan bien como «Being There», pero Reprise estaba contento por el momento. La prensa en lo más alto de sus listas de fin de año y Tweedy pareció lograr lo que se había propuesto hacer: envolver sus sentimientos conflictivos en imágenes que no son fáciles de analizar pero que se hunden profundamente con música que eleva esas imágenes y las subvierte. Si bien podría haber sido el último resultado feliz de la asociación de Tweedy y Bennett. Aprovechó las habilidades de ambos para producir un disco que fue claramente sublime debido a eso.

Es el álbum que consolidó el estatus de Wilco como incondicionales del indie rock interesados ​​en la maleabilidad de las estructuras tradicionales de las canciones y los enfoques poco ortodoxos para hacer discos. Y fue un disco que permitió a un Tweedy más sabio mostrar lo hermosas que pueden ser las contradicciones de la vida, en toda su descarada imperfección.

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