Pedro Aguirre Cerda quedó fuera del “Plan Calles Sin Violencia” impulsado por el Gobierno y vecinos exigen su inclusión para enfrentar la situación de violencia en la zona. Hoy en Palabras Sacan Palabras conversamos con la dirigente vecinal, Verónica Palma y Katherine, joven víctima de una bala loca.
¿Qué recuerdas antes del ataque?
Acudí al consultorio de la población La Victoria por un tema de urgencia por mi embarazo. Me atendieron y venía saliendo del consultorio cuando de repente, en la calle que estaba frente mío se cruzó un auto y en la calle que estaba detrás mío se cruzó una moto y ahí empezó la balacera. No alcancé a meterme y el muchacho que estaba en la moto me disparó. Me llegó una bala en el lado derecho y eso me perforó la pelvis. En este momento no puedo caminar y la bala quedó alojada, fragmentada dentro de mí.
¿Qué pasó con tu embarazo? ¿Siguió esto algún proceso judicial?
Después de que me sometieron a las primeras dos cirugías, se me acercó la PDI para hablar. Yo no pude ver nada más que ver que fue el muchacho que estaba en la moto. No vi caras, nada. Afortunadamente, a mi bebé no le pasó nada y yo estoy bien, porque estoy viva. Estuve casi un mes hospitalizada. Tengo que usar bolsas de colostomía por la bala y no puedo hacer nada por mí sola, solo estar acostada. Hasta para sentarme necesito ayuda.
¿Se supo algo de la persona que disparó?
Nada. Eso es lo que más rabia me da. Cuando mataron al carabinero, ¿En cuántos días encontraron al culpable? Yo llevo casi tres meses y todavía no se sabe nada.
Cuando ves a tantas figuras políticas hablando, ¿qué sientes?
Me da rabia porque soy una persona común y corriente. No encuentran al culpable siendo que yo entregué todos los detalles que pude, recopilé testimonios de los vecinos. Lamentablemente no había cámaras. Ahí está el caso, en nada.
¿Crees que la justicia no siguió porque hay muchos casos similares? ¿Qué te empuja a estar viva?
Tengo tres razones muy grandes. Mis dos hijos y el que viene en camino. Tengo que seguir adelante por ellos. No me puedo echar a morir por lo que me pasó.
¿Cómo es su sector? ¿Cómo sienten el clima de delincuencia?
Mi sector tiene mucha gente adulto mayor. Estamos colindando con la Santiago 1 y se está levantando, supuestamente a nivel latinoamericano, el mejor Instituto Médico Legal que estará acá en Chile. Como dirigenta estoy muy preocupada. Los vecinos me preguntan qué va a pasar cuando tengamos a los deudos de los narcos, cuando esté construido el edificio. Vamos a tener balaceras, ruidos molestos, multitud de personas que vayan a ver a sus difuntos. Tuvimos también un operativo de los mal llamados “peloteros” en nuestro sector. Éramos relativamente un sector tranquilo.
¿Cuándo empezaste a ver que cambiaba?
Después de la pandemia. De alguna manera pasó que se empezó a notar.
¿Cómo se notó este cambio?
Con los robos. A plena luz del día robos a señoras que iban a comprar el pan con dos lucas nomás, amenazadas con cuchillos. El alcalde decía que es un estado de sitio de facto. Exactamente. Nosotros estamos en un estado de sitio autoimpuesto.
¿Qué son las personas que acomplejan el sector?
Son personas que están consumiendo. Tenemos videos de vecinos que tienen cámaras y son gente que está angustiada por la droga. El robo de cables también es impresionante.
¿De qué manera creen ustedes que puedan vivir mejor?
Mayor seguridad y más dotación de carabineros para poder llegar. Tanto humana como material en vehículos. Más que nada, en estos momentos, estamos pidiendo seguridad. Estamos decepcionados por no estar en las 46 comunas porque quedamos al medio. Tenemos Santiago al norte y Lo Espejo al sur. Cuando los delincuentes de esas comunas se vayan, ¿dónde van a ir? Aquí.
¿Cómo se explica quedar fuera del programa Calles Sin Violencia?
El alcalde no nos puede dar una respuesta concreta y yo tampoco sabría decirlo. Hemos tenido cuatro funerales narcos, uno incluso sin la presencia del fallecido porque estaba en Italia. Los fuegos artificiales y las balaceras, que se confunden entre sí, son de todos los días. La gente está temerosa. La comuna está señalada como sector rojo, donde tampoco tenemos posibilidad de salir. Necesitamos que el gobierno nos escuche, que escuche al alcalde. No está pidiendo nada personal. Él siempre está ahí. Seguridad Ciudadana también, aunque no puedan hacer mucho.