Hoy en Palabra Que Es Noticia conversamos con el fundador y vocero de Ciudad Luz, Tomás Steinacker.
El Ministerio de Energía publicó en el Diario Oficial el decreto que pone fin a la fijación de precios de las cuentas de la luz. La medida llevaba vigente desde noviembre de 2019 y su término, según estimaciones de Empresas Eléctricas, supondría un alza en las cuentas de luz de la población que iría desde un 2,5 a un 16,5 por ciento dependiendo del consumo energético de cada hogar. La inminente alza reavivó la discusión sobre alternativas de energías renovables, en un clima donde según el gremio el costo de generación de energía ronda el 70 por ciento de la cuenta de electricidad de cada hogar.
¿Cómo recibes la noticia del aumento? ¿Cuánto van a subir las cuentas de la luz?
“Es una lamentable noticia. Es la primera alza, que corresponde a un aumento del año pasado que por procesos administrativos se retrasó hasta ahora y es la primera de tres que podemos esperar para 2023”, señala Tomás Steinacker.
¿Esto se supone que tiene un rezago?
“2019 se impulsó una ley que generó un fondo que es parecido al mecanismo de los combustibles, que permitía mitigar el alza de las cuentas de la luz. Hay un rezago con todas estas leyes y ese fondo se está acabando, así que podemos esperar un alza que podría llegar gradualmente hasta el 50%”, indica el fundador y vocero de Ciudad Luz.
¿Esta alza considera el IPC?
“Sí, está considerado. Aunque hay otros factores que aumentan el costo como los precios de los combustibles, los contratos de energía donde hay varios problemas en el sector energético respecto a cómo están estructurados los proyectos de energías renovables, la guerra en Ucrania, etc”, afirma Tomás Steinacker.
¿Cuántos tramos son los que se generaron y qué porcentaje de la población está en estos tramos?
“Son tres tramos: de 350 kilowatt-hora hacia abajo, de 350 a 500 y de 500 hacia arriba. La gran mayoría de la población está en el primer tramo y debiera experimentar, en total, un alza que ronda el IPC. Los otros tramos tendrán una subida más alta, cercana a como deberían haber subido las tarifas normalmente que podría llegar al 50%”, asegura el fundador y vocero de Ciudad Luz.
¿A qué te refieres con “la mayoría de la población”?
“En torno a un 80% de la población. Los que más van a estar complicado son las pymes y las empresas de todo tamaño quienes en general tienen un consumo por sobre 350 kilowatt-hora”, puntualiza Tomás Steinacker.
¿Hay algún acuerdo con las empresas eléctricas que permita retrasar las alzas como se hizo hasta ahora?
“Se esperaba que bajaran las tarifas y esas bajadas futuras son las que usamos ahora para que no subieran las cuentas. Lamentablemente esa condición que tenía en el mercado, entre la inflación, la guerra de Ucrania, el alza de combustibles, ese acuerdo pareciera quedar en el pasado porque esas bajas futuras técnicamente ya las gastamos”, asevera el fundador y vocero de Ciudad Luz.
¿A estas alturas se puede optar por energía solar?
“La gran mayoría de nuestro sistema está basado en la generación eléctrica que ocurre en los proyectos que están lejos de las ciudades. Son los que definen la mayor parte del precio. La generación eléctrica, sobre todo con energías renovables, tiene sus complicaciones porque el mercado aún tiene problemas con su transmisión. Lo que debería pasar es que este retraso genere alzas en los precios, pero podemos optar por lo que se denomina “generación distribuida”, donde se genera energía en los puntos de consumo acortando las líneas de transmisión”, plantea Tomás Steinacker.
“Esto está disponible para todas las personas a través de la ley de Net Billing, que permite que cada usuario pueda ser generador en su casa o en su empresa, poniendo paneles y generando energía que además puede inyectar al sistema. En Chile la penetración de energía, a pesar de tener un buen marco regulatorio, ha sido más bien lenta comparado con otros mercados más desarrollados. En Australia, por ejemplo, una de cada cuatro casas cuenta con algún tipo de generación de energía renovable”, complementa.
¿Cómo se podría financiar la instalación de estos sistemas?
“Son sistemas de largo plazo, a 20 años. El gran problema es la instalación por su alto costo pero el mercado ofrece opciones. Existe algo llamado créditos solares, donde alguna empresa financia la instalación y cobra una cuota que es menor que el ahorro que genera el mismo sistema. Otra opción tiene que ver con créditos comerciales bancarios convencionales. Hay varios bancos que están ofreciendo esta alternativa con tasas especiales, permitiendo que los usuarios inviertan en energía solar para salir del sistema antes. Un sistema solar en una casa puede llegar a bajar la cuenta en un 100%”, fundamenta el fundador y vocero de Ciudad Luz.
¿Dónde se puede informar más al respecto?
“Pueden visitar www.ciudadluz.cl donde tenemos un cotizador que permite si se puede o no optar a un cambio a energía solar y cuáles son las opciones de financiamiento de cada proyecto”, concluye Tomás Steinacker.