Hoy en Palabra Que Es Noticia conversamos con el ex ministro del Medioambiente, Marcelo Mena.
El Consejo del Salmón valoró los resultados de la votación en Comisión Mixta del Proyecto de Ley que crea el Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas, SBAP. El gremio de las productoras de salmón relevó que se haya mantenido la norma legal que permite la presencia de centros de cultivo en áreas protegidas. Recordemos que la Comisión Mixta despachó a Sala del Senado el proyecto de ley, pero la indicación presentada por el Gobierno, que prohibía concesiones salmoneras en reservas naturales fue rechazada por la instancia. El controversial artículo buscaba eliminar la actual excepción que rige en la Ley de Pesca, que permite a estas industrias instalarse en zonas protegidas.
¿Has podido seguir la discusión sobre el Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas y la indicación del Ejecutivo
“Esto es importante porque es histórico avanzar en un Servicio de Biodiversidad y es un proyecto de ley que han tramitado todos los ministros de Medioambiente que han existido y nos pone al día en las recomendaciones de la OCDE y para la preservación del ser humano. En ese contexto, hay una falta de armonización porque hay un subterfugio legal que va en contra de la conservación y que permite actividades extractivas. Es lamentable que se haya rechazado, porque significa que operaciones que son contrarias al objeto de conservación van a seguir funcionando. El inevitable escape de salmones, el sobreuso de antibióticos y la presencia de parásitos son un riesgo para la biodiversidad de las reservas naturales”, señala Marcelo Mena.
¿Cómo recoges este punto del temor de los trabajadores de perder sus trabajos?
“Cuando uno habla de conservación hay que dejar atrás la discusión de sectores en particular. En este caso, estas operaciones se emplazan en parques nacionales porque han ido depredando, dejando una estela de explotación, desempleo y alta contaminación. Cuando se piensa en desarrollo sustentable también pensamos en negocios que duren a lo largo del tiempo y ese no es el caso de la salmonicultura. Creo que les falta autocrítica, pero se entiende la preocupación de los trabajadores. Aquellos que han profitado de este negocio se esconden de los trabajadores”, indica el ex ministro del Medioambiente.
¿Cómo se concilian esas dos cosas?
“Tenemos que tener una mirada más colectiva y a largo plazo. Es importante reconocer que las prácticas actuales de la salmonicultura hacen que los colapsos sean inevitables. Ya en 2016 tuvimos que salir en su rescate porque las cargas ambientales que generan van más allá de lo que son capaces de gestionar. En ese momento había un problema grave, porque había tantos salmones podridos y muertos que no había basurales suficientes para dejarlos. Lo que ha ocurrido con la salmonicultura en Chile suele ser pan para hoy y hambre para mañana”, asegura Marcelo Mena.
¿Cómo va a seguir discutiéndose esta normativa ahora que se rechazó esta indicación?
“Los mapas de riesgo climático mostraban la incompatibilidad de este tipo de operaciones ante la inevitable alza de la temperatura del mar. Ya vimos que esto pasó el año 2021. Uno puede aspirar a frenar regulaciones, pero lo que no va a poder frenar es el cambio climático, que hará más difícil este tipo de operaciones”, afirma el ex ministro del Medioambiente.
¿Esto es por nuestro modelo de desarrollo?
“Es la gran dicotomía entre cortoplacismo y largoplacismo”, apunta Marcelo Mena.
¿Dónde tenemos la certeza de que se cuenta la verdad sobre la industria de la salmonicultura?
“Lo que ocurre acá es que hay una industria que tampoco cumplía en sus pares. Durante la pandemia bajó la fiscalización de Sernapesca. Es bueno que ahora haya una fiscalización de los centros de cultivos. Es una industria que tiene sus contradicciones y que muchas veces va en contra de las regulaciones. El lugar de emplazamiento donde están hoy es precisamente donde tienen mayores operaciones. Uno puede no creer en el cambio climático, pero es un hecho y va a afectar a estas industrias que no han querido tomar los resguardos necesarios”, comenta el ex ministro del Meidoambiente.
¿Debería desaparecer este cortoplacismo?
“Hoy podríamos haber invertido en una operación nueva y rentable, pero no lo hicimos. Si nosotros queremos seguir estando acá en los próximos 50 años, tenemos que cambiar la lógica con la que estamos haciendo las cosas. Trabajar para construir a futuro y no depredar lo que hay hoy para quedar sin nada mañana”, concluye en Palabra Que Es Noticia Marcelo Mena.