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Mujer pasó cuatro años rezándole a Shrek pensando que era Buda

Shrek puede ser un ogro, un principe, alguien insolente, sucio, fétido y gruñón, pero nunca alguien a quien rezarle... ¿o sí?

Shrek Buda Mujer
DreamWorks

Shrek es una de las películas más emblemáticas de la animación de las últimas décadas. Y por muchos motivos, desde la deconstrucción que hace de las cuentos de hadas, hasta su humor que a 22 años de su estreno, no envejece.

Es tanta la admiración y devoción que tienen las personas por esta cinta, que desde fuera parece un culto. Pero lo que muchos no esperarían, es que alguien realmente considere a Shrek, una entidad divina a la cual rezarle. Sin embargo, sucedió.

¿Shrek o Buda? No hay mucha diferencia

El hecho en sí, se viralizó por redes sociales. Y la protagonista habría sido una mujer de Filipinas, que estuvo unos modestos cuatro años rezándole a una figura del persona, pensando que era Buda. Así lo compartió la cuenta de Twitter, Somos Cosmos.

En defensa de la señora, debemos decir que la figura es abierta a confusiones. Aunque claro, solo si nunca has visto el clásico de DreamWorks. Las burlas y chistes al respecto, como es de esperar, fueron variadas.

“Si existiera una religión de Shrek, sin duda alguna haría parte de ella”, comentó alguien. “Alabado seas, Shrek», clamó otro.  Alguien mencionó que “Ojalá haberle rezado durante tanto tiempo a Shrek, para que te traiga fortuna y buena salud”, o  “Cada quien le reza a lo quiere”, dijeron más abajo.

Mientras que una persona mencionó: «Eso no es nada, hay gente que lleva décadas rezandole a una fotografia del actor inglés Robert Powell». Esto, en referencia al actor que interpreta a Jesús, en la eternamente película transmitida por TVN para Semana Santa, Jesús de Nazareth.

No es la primera vez que sucede algo similar. Es cosa de recordar el caso de Brasil, donde una anciana durante años le rezó a una figura del El señor de los Anillos, pensando que se trataba de San Antonio. La figura, por supuesto, se trataba del Elrond.

Bueno, quiénes somos para juzgar. Cada quien le reza a quien necesite, y eso incluye a personajes de ficción.


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